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Este 3 se diciembre se conmemora el vigésimo aniversario de uno de los crímenes más sonados y sentidos en la capital del Magdalena, el del juez penal especializado, Javier Alfredo Cotes Laurens.

Eran las 7:30 de la mañana del lunes 3 de diciembre de 2001, cuando los pistoleros irrumpieron en su casa de la carrera 18 con calle 25A, del barrio Santa Elena, y sin mediar palabra le propinaron varios tiros a Cotes.

Los sicarios llegaron a la vivienda del jurista en una moto de referencia DT 125.

Uno se bajó y desenfundó una pistola calibre 9 milímetros automática, accionándola en más de 20 oportunidades, impactando en 10 de ellas en la humanidad del juez.

El homicida emprendió la huida en una segunda motocicleta junto a otros dos sujetos que los esperaban cerca del lugar.

{"titulo":"Juez ordena que permanezcan sellados pruebas y documentos de Alex Saab","enlace":"https://www.elheraldo.co/colombia/alex-saab-pruebas-y-documentos-se-mantendran-en-secreto-869419"}

Javier Cotes Laurens solo llevaba un mes en su cargo de juez especializado en los Juzgados de Santa Marta, luego de ejercer como Juez sin Rostro en Bogotá.

En ese lapso realizó dos fallos de fondo: Una sentencia absolutoria a un procesado por el delito de tráfico de estupefacientes y otra condenatoria el 22 de noviembre que afectó a un jefe paramilitar de la región.

Para esa época (2000 y 2001), en Santa Marta se venían desarrollando amenazas contra jueces, unidades de la Fiscalía y de la Policía Nacional por parte de las autodefensas.

El recuerdo

Transcurridos 20 años de este luctuoso suceso que conmocionó a la capital del Magdalena, los familiares del inmolado abogado siguen reclamando 'justicia'.

Su esposa Ana Beatriz Mozo y sus hijos Fabián Enrique, Javier Ernesto y Carlos Bernardo, extrañan a quien consideraron 'un luchador de la vida, justo y ecuánime' y agradecen a los samarios y especialmente a los miembros del poder judicial, el que no lo hayan olvidado.

'Nos dejó un legado. Sus virtudes y valores dejaron huella en todos aquellos que lo conocieron, pues su alegría y honestidad siempre fueron su estandarte de su comportamiento', dijo la viuda, en diálogo con EL HERALDO.

{"titulo":"Juez envió a la cárcel a un profesor por el delito de acceso carnal violento ","enlace":"https://www.elheraldo.co/bolivar/juez-envio-la-carcel-un-profesor-por-el-delito-de-acceso-carnal-violento-en-mompox-869117"}

Agregó que 'sus buenos actos, don de gente y profesionalismo, lo hicieron merecedor del respeto y la admiración entre sus amigos y compañeros'.

'Siempre se caracterizó por ser una persona ejemplar, de acciones correctas, no en vano por ello se hizo merecedor al premio 'José Ignacio de Márquez', como mejor Juez de la República, otorgado el 18 de diciembre de 1996', comentó.

Recordó que su esposo presentía que algo malo le podría pasar y eso lo angustiaba mucho, porque sus hijos estaban pequeños y no quería dejar de verlos crecer.

Su sueño era convertirlos en profesionales pero sobre todo personas de bien, que le aportaran a la sociedad.

Un anhelo que desde la eternidad vio materializado, pues sus tres retoños siguieron su ejemplo y hoy son abogados. Fabián, el mayor, es Juez de la República.

¡Justicia!

Los Cotes Mozo siguen a la espera que se haga justicia y oran para que la violencia en todas sus manifestaciones cese en el país.

'A través del tiempo hemos sanado, no existe odio en el corazón, pero si mucha inconformidad porque al hombre que procuró ser justo y hacer justicia, no se le haya logrado esclarecer quién lo asesinó', dijo Ana Beatriz Mozo.

Fabián Enrique, el mayor de los Cotes Mozo, sostiene que tarde que temprano la justicia llegará y manifiesta, con convicción, que 'el hampa siempre cede ante el ímpetu que reclama la verdad'

'Ahora puedo comprender que aquel genuino soñador jamás dejó de creer que se podía construir un país mejor, una patria desapoderada de los mismos tres mafiosos de siempre', reflexionó su hijo.

Agregó que sobre esa idea, la de un país mejor, 'nos decía que solo se podría alcanzar desde la prestación de un servicio público honesto y desde la templanza que moldea al ciudadano de a pie, luego de haber estudiado'.