Ciudadanos muestran su descontento; ¿Gobierno se hará de los oídos sordos?

La ‘Marcha de las batas blancas’, una manifestación convocada por los sectores de salud a la que se sumaron integrantes oposición, sindicatos de camioneros, gremios empresariales y agrupaciones de centro, dio un sonoro golpe sobre la mesa del ámbito político colombiano.

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Aunque inicialmente estaba desacreditada y carecía de ‘fuerza’, según el oficialismo, el masivo registro de ciudadanos que salió a las calles, especialmente en ciudades clave como Bogotá y Medellín, ocasionó que altos funcionarios del Gobierno se estrellaran con una realidad que no ha querido ser aceptada.

'Hoy (ayer) debemos tener la grandeza de reconocer que muchas personas se movilizaron, que lo hicieron con todas las garantías y pudieron expresar su descontento. Esta es una semana que como gobierno debemos afrontar en reflexión y autocrítica', reconoció Laura Sarabia, directora del Dapre, y considerada como la persona más cercana a Gustavo Petro.

Sin embargo, las declaraciones de Sarabia parecieron ser las únicas sensatas del Gobierno. Todos los demás funcionarios, al igual que el presidente, restaron importancia al tema fundamental de la marcha, el desazón actual, y se centraron en argumentar que esta vez, a diferencia de las marchas anterior, no hubo jóvenes heridos por las fuerzas policiales.

'Lo que estamos viendo aquí es que esta marcha y su inconformismo es inocultable. Esto es el verdadero cambio que se merece el país porque queremos gobernantes preparados, que tomen decisiones basadas en evidencias, pero sobre todo que nos escuchen', señaló el concejal bogotano Juan Daniel Oviedo.

A su turno, el senador y exjefe negociador de paz Humberto de la Calle, expresó: 'Es incontrovertible que la marcha ha sido muy grande. El gobierno debe rectificar. Fallaron sus asesores: predecir que la marcha sólo era del Centro Democrático, más que un gran error de juicio fue un enorme tiro en el pie. Es regalarle a ese partido un triunfo que fue una movilización genuinamente ciudadana'.

En este sentido, de acuerdo con De la Calle, si el Gobierno en verdad desea lograr avances significativos en el país, debe tender puentes con voces contrarias y llegar a consensos urgentes.

'Si el gobierno continúa aislado creyendo que lo de hoy (ayer) es solo un lamento de la élite y en consecuencia no rectifica, su mayor problema en el 2026 va a ser el severo juicio de la izquierda. Su maximalismo terminará en una lánguida oportunidad de cambio perdida. Qué debe hacer el gobierno? Abrir un espacio genuino para lograr acuerdos. Cambiar su talante belicoso. Y modificar su gabinete porque las mismas voces pendencieras no tiene espacio para buscar convergencias', aseguró.

Sin embargo, algunos expertos consideran que el presidente Petro cada vez está más radicalizado y

'Estamos cada vez más advertidos: el presidente Petro, que planea convocar una constituyente por encima de las vías institucionales, deja claro que los cientos de miles de manifestantes que salieron a la calle no son lo que él llama 'el pueblo'. Gravísimo que mientras abre esa peligrosa puerta de constituyente 'del pueblo' también busque definir cuál es y cuál no es ese 'pueblo'. Estamos advertidos', aseguró el politólogo Fernando Posada.

Además, el analista Pedro Viveros consideró que, con lo vivido en la jornada de este domingo, parece que:' el cabildo constituyente callejero anti Petro se constituyó en el país'.

Por su parte, Miguel Uribe Turbay, senador del Centro Democrático, consideró que la masiva participación en la marcha le 'envía un mensaje contundente al presidente Gustavo Petro y a sus seguidores'.

'Colombia rechaza de manera rotunda cualquier intentode socavar la democracia y concentrar el poder en manos de unos pocos. Los colombianos han dejado claro que no están dispuestos a ser cómplices de un gobierno que promueve reformas que van en contra del interés nacional y el bienestar de la sociedad.

Este día pasará a la historia como un momento de unidad y esperanza para Colombia', aseguró.

Renglón seguido, David Luna, de Cambio Radical, le pidió al Gobierno que escuche a los opositores.

'Lo de hoy fue mucho más allá que nosotros los políticos y nuestras vanidades. Hoy vi en las calles personas que aman este país, tragándose sapos para convivir pacíficamente y defendiendo sus propias ideas. Hoy la lección la dió la ciudadanía libre, el 'pueblo' que llaman otros. Debemos escuchar. Hay futuro, hay esperanza', manifestó.

Petro reconoció que este domingo hubo manifestaciones masivas contra su Gobierno en varios lugares del país y dijo que espera que las 'fuerzas populares' que supuestamente lo apoyan respondan el 1 de mayo, cuando se celebra el Día del Trabajo, en una nueva marcha que se realizará a su favor.

Al reconocer la fuerza de las protestas, el presidente dijo que 'el Gobierno buscará caminos de entendimiento' pero el presidennte amenazó: 'Si la derecha quiere burlar las elecciones e irrespetar el voto del pueblo no habrá entendimiento'.