El Heraldo
Carlos Márquez Pérez, (segundo a la izquierda), director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo. Wilfred Arias
Bolívar

Los culpables de colapso de edificio son sus dueños: Unidad de Riesgo

Fiscalía General anuncia el inicio de las investigaciones. Labores de rescate se extenderán por 24 horas. Autoridades confirman 10 fallecidos y 23 heridos. 

El desplome del edificio de siete pisos en construcción Portal de Blas de Lezo II, ubicado en el sector Plan 400 del suroccidente de Cartagena, y que deja como saldo 10 personas fallecidas, sigue despertando cuestionamientos en torno al papel que debieron desempeñar las autoridades locales para garantizar que la obra cumpliera con los requerimientos legales establecidos y prevenir la tragedia que hoy enluta a la capital de Bolívar.

El primero en reaccionar fue Carlos Iván Márquez Pérez, director General de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, hizo un enérgico pronunciamiento contra los constructores del proyecto.

“Los únicos desaparecidos son los dueños del sitio, a quienes se tienen que buscar con el fin de que respondan”. Añadió que “esto no puede seguir sucediendo, pues ha generado la muerte de diez personas. Hay que tomar las medidas jurídicas correspondientes.

Por su parte,  luego de que el curador urbano 1, Ronald Llamas Bustos, confirmó que en la obra había sido usada una licencia de construcción falsa y que tampoco existía ningún trámite para adquirirla, en un acalorado debate el Concejo Distrital de Cartagena planteó este viernes interrogantes como ¿por qué nadie advirtió que la construcción era ilegal? o ¿por qué no se hizo nada para suspender los trabajos a pesar de que se realizaban en un lugar visible?

El concejal del partido de La U, César Pión González, vicepresidente segundo del Concejo Distrital, frente a los interrogantes, le hizo un llamado al alcalde de Cartagena, Manuel Duque, para que le solicite la renuncia a los funcionarios de su Administración  que fueron señalados en la sesión como “responsables”.

“Creo que el alcalde, en primera instancia, debe separar a los funcionarios que les compete la norma. Y dejar que los órganos de control materialicen.  Un control político (del Concejo) en estos momentos  no daría resultados, porque ya esto pasa a manos mayores: a la Fiscalía y la Procuraduría, para ver si hubo faltas disciplinarias y si hay acciones penales”, dijo Pión.

En medio del debate, fueron cuestionados los funcionarios Luz Paternina, secretaria de Planeación; el director administrativo de la Secretaría de Control Urbano del Distrito, Olimpo Vergara Vergara; y la alcaldesa local, Patricia Zapata.

“En varias sesiones nosotros hemos tenido la oportunidad de citar a Control Urbano, a Planeación y Alcaldías locales,  exigiendo resultados  de las construcciones que se hacen en la ciudad, que estaban sin control. Y muchas veces nos atrevimos a decir que los alcaldes locales eran figuras decorativas”, dijo Pión.

El Vicepresidente segundo del Concejo se mostró contrariado porque no existe claridad con respecto a las medidas de seguridad de otras construcciones en la ciudad, como lo expresó la directora del Consejo Gremial de Bolívar, Patricia Galindo, quien advirtió que el 60% de este tipo de proyectos se hacen “de manera ilegal”.

“Nosotros decíamos que constantemente se estaban dejando construir en la ciudad y en espacios que no debían. Ahora el problema no es este edificio. La pregunta es: ¿cuántos edificios con debilidad están construidos en la ciudad?”, puntualizó Pión.

Denuncia

Frente a lo ocurrido, el alcalde de Cartagena, Manuel Duque, quien creció en el barrio Blas de Lezo, dijo que la Administración decidió entablar una denuncia penal contra los constructores luego de conocer que la licencia era falsa.

De los constructores, de acuerdo con información suministrada por la directora del Consejo Gremial de Bolívar, hasta el momento solo se ha dicho que son conocidos como los hermanos Quiroz (Wilfran y María).

“Al enterarnos de que la licencia era ‘chimba’ (falsa), vamos a hacer las acciones del caso para que no nos vuelva a ocurrir esto en la ciudad de Cartagena y hacer sanciones ejemplarizantes porque la justicia tiene que actuar en este caso. Falsificar una licencia tiene una sanción, para no hablarte de los muertos que hubo acá.  No podemos permitir que se burlen de las autoridades de esta manera”, dijo Duque.

El alcalde dio a conocer que, con su equipo de Gobierno, ordenó la creación de una comisión especial para indagar sobre las construcciones de la ciudad sobre las cuales existen indicios de que serían ilegales e hizo mención de que los responsables del proyecto Portales de Blas de Lezo II tendrían  más construcciones de su propiedad.

Miembros de Defensa Civil en labores de rescate.

“Este señor (Quiroz) tenía una licencia totalmente chimba. Y lo peor es que no es el primer edificio que construye. Ha construido ya varios edificios (pero no especificó cuáles). Entonces queremos averiguar qué es lo que está pasando. Vamos a hacer un barrido, no solo en la zona, sino en toda la ciudad, con Control Urbano, las Alcaldías locales, y con los inspectores, que nos den un balance de qué es lo que están haciendo en los distintos barrios de Cartagena, porque esta situación se viene presentando ya desde hace rato”, aseveró Duque.

Puntualizó que “la semana que viene debemos tener un balance general, con el acompañamiento de Camacol, de cuántas viviendas y nuevas construcciones hay en Cartagena y cuántas tienen licencia”.

Licencia falsa

Ronald Llamas Bustos, curador urbano 1, se refirió a las razones por las cuales fue determinado que la valla que mostraba una aparente licencia de construcción, al pie del edificio Portales de Blas de Lezo II, había sido falsificada.

“La valla esa es falsa. No obedece a las vallas que  tiene la Curaduría actualmente. El número de radicado tampoco existe”, sentenció el curador Llamas.

De acuerdo con el curador urbano 1,  la valla era falsificada, debido a que “el radicado comienza por 1”, lo cual es completamente inusual. Además, tenía un logo o emblema en desuso.

“Los radicados de Curaduría siempre han comenzado por cero, con el consecutivo,  y nunca ha llegado a 1.000  en 20 años de la Curaduría de estar existiendo (…) Lo peor es que no tenía licencia”, añadió Llamas.

EL HERALDO constató que en la cuestionada valla fue publicada como número y fecha de radicación: “13001-2-16-1228 – 20  nov. 2016”. Además, se describe como un proyecto de “demolición total y obra nueva”, con uso de “residencia familiar”. No se especifica ni el número pisos ni aparece el nombre de los propietarios de la construcción.

De acuerdo con Llamas, en lo que va de 2017, han sido identificadas seis obras con licencias falsas en Cartagena.

Aunque la Fiscalía inició una investigación preliminar por el colapso del edificio, hasta el momento se desconoce el paradero de los constructores.

Fiscalía abre investigación oficial 

La Fiscalía anunció ayer que abrió investigación oficial por el desplome del edificio Portal de Blas de Lezo II, en el que murieron 10 personas y 26 más resultaron heridas, y que en medio de las pesquisas analizará, sobre todo, los materiales utilizados en la construcción, el estado del suelo y la documentación de la obra.

El ente de control dispuso de un grupo interdisciplinario para realizar las diligencias de análisis de evidencia, así como las entrevistas, pertinentes.

"Ante la situación, el ente acusador, con órdenes de policía judicial, solicitó a las entidades pertinentes respuesta para saber si expidieron documentación para la construcción de Portal de Blas de Lezo II", indicó la Fiscalía en un comunicado.

Un vecino de Blas de Lezo observa los recatistas.

Finalmente, informó el organismo acusador que hace presencia en el lugar de la tragedia con un grupo de funcionarios del CTI, bajo la coordinación del subdirector seccional de Policía Judicial Seccional Bolívar, apoyado por miembros de la Sijín, “con el fin de obtener resultados".

Labores de rescate se extenderán 24 horas

Un amanecer distinto fue el que vivieron ayer los cerca de 50 mil habitantes del barrio Blas de Lezo en la zona suroccidental de Cartagena tras la tragedia que se registró en el plan 400 donde una edificación de siete pisos se vino al piso como un gran castillo de naipes. 

Ya son diez los muertos que dejó esta tragedia, según informó Carlos Iván Márquez Pérez, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres. En total fueron veintitrés las personas rescatadas y atendidas en los diferentes centros asistenciales que se unieron para atender la emergencia. De ellos solo uno reviste gravedad. Tres familias resultaron afectadas y se vio la necesidad de evacuarlas para que recibieran la atención por parte de la administración distrital. Fueron 20 personas en total.

El funcionario Márquez y el alcalde de la ciudad, Manuel Vicente Duque, recorrieron la zona de la tragedia a las 10:20 de la mañana. 

“En 24 horas aspiramos a que el área de 360 metros cuadrados esté revisada y se pueda cerrar la operación”, afirmó  Márquez Pérez, luego de participar del Puesto de Mando Unificado instalado en el barrio Blas de Lezo.

Al evaluar los trabajos que se están desarrollando en el lugar, el director de la UNGRD agradeció a las organizaciones que se han ofrecido a enviar voluntarios, pero agregó que las labores de búsqueda y rescate se están llevando a cabo de manera permanente con rotación de socorristas.

Para Márquez está claro que las acciones que continúan en las próximas horas tienen que ver con la remoción de escombros aspirando a que en 24 horas pueda estar concluyendo la operación.

El acompañamiento a las víctimas y a los familiares por parte de la Cruz Roja fue fundamental en un momento como este. En cada momento que la retroexcavadora entraba con la pala se acrecentaba la ilusión para algunos de los familiares que aguardaban que sus seres queridos aparecieran aún con vida, o simplemente, aparecieran.

Precisamente ayer mismo el alcalde Manuel Duque se trasladó a los centros asistenciales donde eran atendidos los sobrevivientes. El mandatario conoció la evolución en el estado de salud de estos pacientes que hoy dan gracias a Dios por estar vivos.

“Al escuchar las historias de los sobrevivientes es cuando decimos: los milagros existen. Obreros que tenían dos días en la obra, por ejemplo. Otro que pasó por ahí y habló con el maestro de obra y comenzó a trabajar porque tenía que llevar la comida a su casa. Uno se aferró a su hijo de 8 meses de nacido y eso le dio fuerza, pese a estar sin luz y sin oxígeno”.

Un veterano de la guerra de Corea era el dueño de la casa

Algo muy parecido a una guaca sería lo que encontraron los dos primeros obreros que llegaron a trabajar a mediados de noviembre del año pasado en una retroexcavadora. Una caja de plástico verde contenía en su interior medallas de honor, dólares, monedas de oro y varias cadenas. Estos elementos pertenecían entonces al que era el propietario de la residencia quien había participado, al parecer, lleno de orgullo en la guerra de Corea.

Los vecinos del sector recordaron que la casa que se demolió pertenecía al difunto Manuel Pautt, un hombre más bien reservado que, al parecer, guardó parte de su gloria en la pequeña caja. Para los vecinos es muy extraño que la misma desapareció y quedó en manos de los albañiles. Los habitantes del sector que una vez murió Pautt, los hijos decidieron venderle a la firma constructora de los hermanos Quiroz quienes acabaron de un solo tajo con los sueños de un hombre que llenó de gloria una de las esquinas del plan 400 del barrio Blas de Lezo.

“Nosotros intentamos rescatarlo pero ellos no nos quisieron entregar la caja. El señor Manuel era un vecino que fue muy apreciado”, comentó una de las vecinas que se abstuvo de revelar su nombre.

Los moradores precisaron que una vez encontraron lo más parecido a una guaca decidieron reclamarle a los albañiles pero ellos se perdieron con el tesoro más preciado del viejo Manuel.

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