De los 60 participantes que desde inicio de semana compitieron por la corona en la categoría Acordeonero Infantil, solo cinco llegaron a la final en la tarima ubicada en el Centro Recreacional La Pedregosa.
Santiago Efraín Herrera Martelo, oriundo de Villanueva, municipio del que es el actual rey, fue el encargado de abrir la ronda final entre los acordeoneros infantiles.
El joven que ejecuta el acordeón con mucha garra y fuerza trajo a tarima una puya de sus autoría en la que habla de dinastías tan reconocidas como Los Hermanos Zuleta que desde Villanueva engrandecieron el Vallenato y también se refirió a niños como él que sueñan en grande para seguir haciendo del Vallenato ese género musical que representa a Colombia ante el mundo.
Un llanero con alma vallenata
Vestido de negro de pies a cabeza y con un sombrero del mismo color al mejor estilo de El Zorro, apareció John Emiliano Olmos Prieto ante los ojos del jurado calificador integrado por: Carlos Hernández, Juan Manuel Arzuaga y Néstor Cárdenas, para hacer gala de sus mejores notas.
Este niño de 12 años viene desde el municipio de Maní, Casanare, pero él no es el zorro, a él le dicen El Llanero y contó con el respaldo de una comitiva integrada por 20 personas, este año fue segundo en Villanueva, La Guajira y llegó dispuesto de subir al máximo peldaño en el Festival de la Leyenda Vallenata.
Desde los 2 años toca acordeón gracias a su padre, el bogotano John Olmos que le ha enseñado todo lo referente a este folclor.
'Soy orgulloso de mis raíces aquí me ven con mi sombrero de guama y las cotizas, este calzado tan característico de mi tierra y quiero hacer historia, ya tuvimos a un rey de la Piqueria y a aquí estamos buscando hacer historia', dijo el menor que interpretó una puya de sus autoría llamada ‘El rey David’.
El tercero en turno fue José Alejandro Ospino Mosquera, oriundo de Plato, Magdalena, quien abrió su ronda con el paseo ‘El Pollo Vallenato’ de Luis Enrique Martínez.
De Boyacá para el mundo
El cuarto turno fue para Fernando José Salcedo Matute, quien el año pasado ocupó el segundo lugar y quería seguir en ascenso.
Este boyacense de 11 años compite por cuarta vez en esta categoría.
Proveniente de Nobsa, Boyacá, tenía su acordeón desde antes de nacer, debido a que su padre William Salcedo, conservaba en casa aquel instrumento que nuca logró dominar, algo que para su hijo fue muy fácil y que lo ha llevado a recorrer el país.
A los 5 años, aproximadamente, empezó a tomar clases privadas para presentarse, dos años más tarde, en su primer festival de música vallenata, un género que además de gustarle, lo llena de mucha tranquilidad.
Interpretó la Pua ‘Tócale Fer’, de su propia autoría.
El último acordeonero en esta categoría este año fue Álvaro de Jesús Santana Fernández, de Valledupar, el encargado de hacer respetar la casa. Este menor interpretó una puya de su autoría denominada ‘Tocando con fundamento’.
