El exalcalde de Pueblo Bello (Cesar), Javier Landazabal, se entregó a agentes del CTI, tras permanecer más de nueve meses prófugo de la justicia, luego que el 23 de octubre de 2019 fuera condenado a 5 años y 4 meses de prisión por el Juzgado Tercero Penal del Circuito con funciones de conocimiento de Valledupar por el delito de celebración de contrato sin cumplimiento de requisitos legales.
Aunque inicialmente el exmandatario fue recluido en una clínica de la capital del Cesar tras presentar quebrantos de salud, según la Fiscalía una vez sea dado de alta deberá ser trasladado a un centro carcelario para cumplir la sentencia.
Landazabal, quien fungió como alcalde de Pueblo Bello en el periodo 2012-2015, fue hallado responsable por los cargos que le imputó el ente acusador, por lo que además de prisión, deberá pagar una multa de 66.66 salarios mínimos legales vigentes e inhabilitación en el ejercicio de derechos de funciones públicas de manera temporal.
Los hechos que fueron investigados por la Fiscalía General de la Nación se relacionan con la celebración directa del Convenio 025 del 17 de octubre del 2014, por $90.000.000 con una duración de 2 meses, con una entidad sin ánimo de lucro denominada 'Semillas de Amor y Esperanza'.
El objeto del convenio era 'Aunar esfuerzos a fin de realizar un convenio de cooperación para fomentar proyectos productivos mediante la siembra de cultivos transitorios y mejorar la calidad de vida del sector campesino de esa localidad'.
La Fiscalía pudo demostrar que Landazábal violó los principios de publicidad y transparencia de la contratación, pues no hizo público el convenio a suscribir. Adicionalmente, se evidenció que la entidad 'Semillas de Amor y Esperanza', no era idónea para ejecutar el convenio, ni cumplía con la experiencia requerida para la actividad convenida, que era mínimo de 5 años y solo tenía 2 meses.
Esta sentencia de primera instancia fue apelada pero el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Valledupar la confirmó en diciembre de 2019.



















