Abren comercios con atención al público en Barranquilla

Las esteras se volvieron a subir y  se ‘desempolvaron’ las cajas registradoras. Ya se ajustaron butacas, ganchos de ropa y  tiras de iluminación led. Ya se brillaron los pisos, se desinfectaron después y luego los ‘tatuaron’  con círculos informativos. Ya los asesores y empleados volvieron a sus labores y ahora solo esperan, luego de varios meses sin atención presencial, la tan anhelada  orden de reapertura.

Las distintas superficies de los centros comerciales se volvieron lienzos para ‘pintar’ una infinidad de indicaciones.  La ‘obra’ está lista y sus detalles  -para aquellos que no han podido dimensionar todo el terreno debido a las restricciones que había en muchas áreas- beberán desde hoy otro sorbo de la nueva realidad del mundo.

Macetas sobre bancos, cadenas serpenteando pasillos, pegatinas en el piso, adhesivos en los vidrios, marcas de distancias en los parqueaderos y hasta algunas prohibiciones  en los baños hacen parte del paquete de  medidas de estas moles de las ventas para que algo como comprar ropa sea una experiencia totalmente segura en estos tiempos.

Riomar, una de las dos localidades de Barranquilla que abrirá el comercio desde hoy, ya goza de la aprobación en materia de bioseguridad para que sus principales centros comerciales, Buenavista (1-2), Mall Plaza, Miramar y Viva, abran sus puertas para que los ciudadanos puedan comprar de manera presencia en sus diferentes locales, una cotidianidad del ayer que se perdió hace un poco más de tres  meses.

La noticia de la apertura gradual, entregada en la semana anterior por la administración distrital, fue un alivio para los dueños de los locales comerciales y para una parte de la población, que se ha mostrado renuente en los últimos días a seguir comprando en línea debido a diferentes motivos que van desde la congestión y tardanza en las entregadas, hasta lo poco cómodo que les parece comprar un producto sin haberlo visto de manera directa o, en su defecto, probarlo.

“Creo que es una buena noticia para todos. Uno extraña ir a un centro comercial a compra ropa o así sea comprar un café y caminar por los pasillos. Quizá ahora no será como antes, pero poco a poco todo va volviendo a la normalidad en medio de esta pandemia. La tarea ahora es que nos protejamos y cumplamos con las medidas de los distintos locales”, manifestó Gabriela Velásquez, una joven profesional.

Medidas

Desde el ingreso a un centro comercial hay un estricto protocolo para que el ciudadano pueda comprar. Medidas como el ‘Pico y cédula’ siguen siendo vigentes en estos sitios y son acompañados por distintas recomendaciones cada dos metros y que son visibles hasta en los retretes.

“En el centro comercial Buenavista tenemos listo todo un plan para que la gente pueda venir y hacer sus compras con todos los protocolos. Cada local tiene un aforo distinto dependiendo a su tamaño. El máximo tendrá permitido un ingreso de hasta 40 personas y hay otros locales donde solo entran dos.  No todos los locales abrirán porque han recibido los permisos y en la plaza de comidas solo se permitirán las ventas para llevar”, explicó Cristian Henao, coordinador de seguridad.

Por otro lado, en un recorrido realizado ayer en la tarde por esta casa editorial el ambiente comercial en el suroccidente de la ciudad, un sector que también abrirá sus puertas hoy, lucía tranquilo y sin mayor movimiento. Los locales permanecían cerrados y sin atención, por lo que el impacto de la reapertura solo se podrá ver con claridad desde este lunes.