Sabor y sazón se toman el Carnaval de las Artes
Alrededor del libro ‘Calor residual’, de la autoría del recién fallecido escritor Karim Ganem Maloof se realizó un conversatorio del que participó el chef Alex Quessep.
El Carnaval Internacional de las Artes también incluye sabores y saberes. Continuando con esta “fiesta de la reflexión”, el turno este jueves fue para los amantes de la gastronomía y rendir así un homenaje póstumo a un investigador gastronómico que recientemente perdió la vida: Karim Ganem Maloof.
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El panel conducido por Miguel Iriarte, director de la Fundación La Cueva, contó con la participación de Alex Quessep, Juan Carlos Correa y Jorge Escaff y se desarrolló alrededor de ‘Calor residual’, libro escrito por Karim.
A propósito de esta obra Quessep conversó acerca del valor del legado de Karim para el universo culinario. “La obra de Karim es interesantísima porque comprende los factores que relacionan la cocina tradicional con sus territorios, además de que es capaz de incomodar incluso a los más aventajados de la cocina”.
Sobre esto último, el sucreño dijo que este título del joven escritor no es solo un libro de recetas, sino que invita profundamente a la reflexión de la construcción de la cocina.
“Uno de los puntos más interesantes en el libro es cuando se habla del secreto. En cada cocina hay una especie de secreto o conjuro que buscar dar la sazón y equilibrio a los alimentos”.
Asimismo, Alex también recordó que dentro del universo que comprende la cocina local los sazones comprenden aquello que cada quien considera balance para el sabor.
A su turno, Jorge Escaff, médico psiquiatra y tío del autor habló de Karim en su faceta familiar.
Entre los múltiples recuerdos que se conservan a propósito de Karim, uno de los más vivaces para su tío fue su singular modo de bailar.
“Karim siempre estaba ahí, era muy familiar. Uno de los últimos espacios que compartimos juntos fue en una boda familiar y me pareció increíble verlo bailar para atrás, es sin duda una de las imágenes más claras que tengo”.
Analizado desde su perspectiva como psiquiatra, dijo que evalúa su vida desde el valor de exponerse al público. “Cada vez que se crea algo y se muestra al mundo es un acto de valor, y sin duda Karim era extremadamente valeroso”.
En la dulzura de las militancias en literatura, su primo Juan Carlos Correa también intervino para mencionar lo especial que es Karim para él.
“Karim fue el primero en todo, en ser nieto, sobrino y bisnieto. Y así era en la vida también, su conversación sencilla y cálida siempre daba cuenta de su gran valía”.
Otro de los aspectos que resaltó Correa fue la relación con la mesa como punto de encuentro y convergencias.
“La forma en la que retrata Karim la relación de los alimentos y la mesa me parece muy íntima, en su composición no solo están presente los alimentos como comestibles, sino cómo integradores de la sociedad y la comunión”.
Finalmente, Juan Carlos afirmó que para él ha sido imposible terminar el libro porque el sentimiento siempre lo invade.
“Cada que comienzo el libro lloro un poco, y aunque avanzó un tanto se me ha hecho imposible terminarlo”.
El libro de Karim Ganem Maloof es una compasión que mezcla la literatura testimonial con la narrativa realista presenta en los territorios.
A través de los alimentos como hilo conductual el autor narra la personalidad de sus cercanos y algunos rasgos identitarios de los entornos.
Sin duda, ‘Calor residual’ es una reflexión constante que invita a conocer el pasado, retratar el presente y reconfigurar el futuro.
