El legado de Neva Lallemand se aviva a través de las artes

El arte es un legado que se transmite por generaciones. Dentro del universo de composiciones que comprenden este tipo de expresiones, convergen las aptitudes y actitudes del artista, que no es diferente a la sensibilidad para percibir los detalles.

En medio de la agitación natural de las ciudades aún hay espacio, no solo para disfrutar, sino también para enseñar a hacer arte.

Particularmente, en Barranquilla, esta tarea la desarrollaba la Fundación ‘Neva Lallemand’, la cual lleva el nombre de su fundadora, quien fue la primera mujer egresada de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del Atlántico.

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Como parte de un ejercicio permanente de exploración y un diario redescubrir, cada sábado, durante la jornada de la mañana, la IED Los Rosales, ubicada en el barrio Las Malvinas, se convierte en un entorno creativo para los vecinos del sector.

Actualmente, hay alrededor de 120 inscritos, los cuales reciben clases de introducción y profundización, en los que adquieren habilidades para la vida a través de la implementación de técnicas de dibujo, pintura, tejido, crochet, e incluso hilorama. Esta última, consiste en un ejercicio de construcción de formas en hilo sobre una base de madera.

Otro de los espacios de formación que se destaca dentro del proceso de la primera infancia es el tejido, un trabajo que requiere de mucha paciencia, dedicación, pero sobre todo de interés.

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Luisa Aros es una joven voluntaria que se encarga de compartir su conocimiento en hilorama, una técnica que combina el uso de hilo con la creación de formas geométricas y que busca estimular la creatividad y la motricidad fina.

Aros contó que se encuentran todos los sábados para hacer arte.

'Tener la posibilidad de poder enseñarles y aprender habilidades que ellos también pueden multiplicar con sus familias y amigos, e impactar positivamente su entorno, no tiene precio'.

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Neva Lallemand, oriunda de Puerto Colombia, quien se inspiraba en su tierra natal para plasmar en sus obras el mar, el muelle, la comida y la cotidianidad de sus habitantes, fue además la primera mujer egresada de la Escuela de Bellas Artes de Barranquilla, en 1949.

La obra de esta mujer de ascendencia alemana traspasó las fronteras del país con exposiciones en Venezuela, Estados Unidos, Italia, España, Inglaterra y Francia, entre otros países.

A pesar de que la orientación principal del espacio de formación sea las artes, haciendo alusión a la destacada labor que desarrolló su fundadora en este campo, una de las áreas de capacitación en las que más trabaja la fundación tiene que ver con el entorno.

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Con un enfoque medioambiental, entendiendo la crisis por la que atraviesa el mundo y también pensando en el aprovechamiento de los recursos, uno de los puntos más fortalecidos entre los jóvenes es la creación de huertas caseras.

En este espacio los niños y jóvenes aprenden desde la práctica a identificar semillas, abonos, tipos de tierra, humedad, pero sobre todo modos de sembrado.

La intención con esta iniciativa es crear huertas caseras que no solo promueven el cuidado y la protección del medioambiente, sino que también provean de alimentos a varios hogares.
Estiven Perez, uno de los jóvenes de undécimo grado que hace parte de este proceso verde comentó:

'Esto ha sido muy enriquecedor, la verdad es que ninguno de nosotros sabíamos que éramos capaces de sembrar y que nuestras semillas se convirtieran en plantas fructíferas', dijo a este medio.

A través del tiempo, Neva Lallemand acumuló muchísimos logros para su vida artística. Posicionarse como una de las primeras y mejores pintoras de Barranquilla en la década cercana a los 70’; sin embargo, lo más importante para ella fue su fundación. Rey Mercado Lallemand, su hijo y quien actualmente está a cargo del ejercicio artístico en Las Malvinas, compartió algunos recuerdos sobre su madre.

'Ella era una mujer muy apasionada, encontraba inspiración en casi todo; sin embargo, de las cosas que más amaba era enseñar. Siempre estuvo convencida de que la transformación venía de la educación y el arte, esa sin duda fue su mayor motivación'.

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De lo más destacado de la pintora fue su exploración por el cuerpo humano y su ‘atrevimiento’ a pintar desnudos, fue sin duda lo que la llevó a participar en exposiciones individuales y conjuntas a nivel nacional e internacional.

'El legado de mi madre sigue vivo. Despedir a un ser querido es doloroso, pero tener este espacio en el que los niños y los jóvenes aún pueden aprender y disfrutar del arte, hace sentir que ella aún está presente en la Barranquilla que tanto amó', mencionó Rey Mercado.