BOGOTÁ. La plenaria del Senado aprobó este martes en cuarto y último debate la resucitada reforma laboral.
No obstante, el proyecto 2.0 deberá ser conciliado por ambas cámaras antes del viernes o se hundirá.
“Este es el mayor legado del gobierno de Gustavo Petro a los trabajadores y trabajadoras de Colombia. Sin embargo, hace falta la conciliación, que es el último punto y se tiene que hacer antes del próximo viernes. Estamos muy atentos a lo que pase”, dijo el ministro del Interior, Armando Benedetti.
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Entre lo aprobado se encuentra que los estudiantes del SENA tendrán un contrato laboral: recibirán el 75 % del salario mínimo durante el primer año y el 100 % en el segundo. Además, tendrán derecho a seguridad social y ARL. Las empresas deberán contratar aprendices del SENA o, en su defecto, pagar una monetización equivalente a 1,5 salarios mínimos por cada aprendiz no vinculado.
Las madres comunitarias serán incorporadas a la planta del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
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Se refuerza la obligación de contratar formalmente a trabajadoras y trabajadores del servicio doméstico.
El trabajo en domingos y festivos se remunerará con un recargo del 100%.
A los estudiantes de carreras en salud, durante su internado, se les deberá reconocer un salario mínimo legal mensual.
Se establece que la jornada nocturna inicia a las 7:00 p. m., y desde esa hora aplica el respectivo recargo.
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Se elimina el pago por horas: el salario mínimo será el punto de partida para cualquier relación laboral.
El contrato a término indefinido se establece como la forma general de vinculación laboral.
Las aplicaciones de reparto deberán garantizar el pago de seguridad social y ARL a sus trabajadores.
Las personas cuidadoras podrán concertar con sus empleadores espacios para ejercer sus labores de cuidado.
Los teletrabajadores recibirán un subsidio de conectividad para el desempeño de sus funciones.
Y se refuerzan las garantías laborales para las mujeres trabajadoras del campo.
No obstante, el senador Carlos Meisel, del Centro Democrático, cuestionó duramente la reforma laboral aprobada.
“Condenan a la quiebra a las micro y pequeñas empresas, condenan a la frustración la ilusión de aprendices. Aprueban una pésima laboral en el Congreso con dos tipos de votos: los dogmáticos fuera de la realidad y los que compra el Gobierno que después protagonizan escándalos”, advirtió el legislador opositor.