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Una madre de familia* denunció ayer que desde hace un año viene siendo víctima de agresiones, tanto físicas como verbales de su pareja*, en su vivienda en Soledad.

La mujer aseguró que su pareja solía agredirla con trompadas, patadas e incluso cortes con cuchillo en sus pies, para que no saliera a la calle.

Varios vecinos se habían percatado de los hechos, pero el pasado 29 de noviembre, a las 4:30 de la mañana, contó que el supuesto agresor la emprendió contra su hija de cuatro años, a la que le propinó un golpe en la cabeza con una tabla que dejó inconsciente a la menor.

'Ese día se levantó sollao y que porque yo me estaba acostando con otro hombre, cogió una tabla para pegarme y yo alcancé a salir de la casa, pero cogió a mi hija y le pegó en la cabeza', dijo en medio de lágrimas la madre de familia, rodeada de varios vecinos.

Tras la presunta agresión, el agresor fue capturado por una patrulla de la Policía que se lo llevó, pero a los pocos minutos lo dejaron libre, aseguran vecinos de la mujer.

La niña fue auxiliada por su mamá y varios residentes del sector que la trasladaron a un hospital en Soledad, ubicado a escasas dos cuadras del lugar de los hechos. Desde ese día –martes– la menor permanece recluida en la unidad de cuidados intensivos del centro asistencial debido al fuerte golpe que recibió en la cabeza.

Algunos vecinos aseguraron que sufrió cinco fracturas en el cráneo por los golpes que le propinó el agresor y no uno solo como dice la madre que le propinó su excompañero sentimental.

EL HERALDO llegó a la clínica para averiguar por el estado de salud de la niña, pero funcionarios informaron que 'no había nadie de la parte administrativa que suministrara la información y que regresaran al día siguiente (hoy)'.

Tras el hecho, el hombre no ha vuelto a parecer por el barrio, sin embargo, su compañera sentimental interpuso una denuncia en la Fiscalía por el delito de violencia intrafamiliar.

La amenazó

La mujer asegura que desde hace un año que se fue a vivir con el señalado agresor, este la golpeaba permanentemente.

'Siempre me celaba y también consume drogas. Una vez me mandó a la calle a pedir comida porque me amenazó con matar a mis otros dos hijos si no lo hacía'.

La mujer confesó que vive con miedo, y que, incluso, no duerme en su casa por temor a que una noche su pareja se meta y le haga daño.

*Los nombres de la menor, la madre y del presunto agresor se omiten en cumplimiento de la legislación que protege los derechos de la infancia.