El actor Armie Hammer se vio seriamente señalado y afectado por las acusaciones sobre abuso sexual y canibalismo en el 2021.
Desde ese momento su prometedora carrera en Hollywood se vino abajo, y además también se vio afectado personal y financieramente. Tuvo que vender hasta su camioneta porque no tenía para pagar la gasolina.
“Tengo un coche nuevo. Es pequeño. Es un híbrido. Probablemente gastaré unos 10 dólares de gasolina al mes, y eso es todo”, expresó en sus redes sociales.
Todo el escándalo inició cuando fueron publicados unos mensajes que envió a mujeres en sus redes sociales tales como: “Necesito beber tu sangre” o “soy un caníbal al cien por ciento”.
Su nombre fue tendencia por varias semanas en los medios y las redes sociales. Incluso, su expareja, Courtney Vucekovich, confirmó a la prensa “extraños”, fetiches sexuales de Hammer.
Sin embargo, el actor negó haber consumido carne humana. Pero, fue demasiado tarde porque perdió proyectos como 'The Billion Dollar Spy'. Con respecto a sus infidelidades a su esposa Elizabeth Chambers, de quien se divorció en 2023, manifestó que fueron consensuadas.
Con respecto a la acusación de Effie Angelova, quien lo acusó de abuso sexual, y psicológico, dijo que los dos tenían una relación “muy cargada de sexualidad, entre dos personas con inclinaciones y perversiones muy similares”.
“Cualquiera de las conversaciones que tuve con Angelova dentro de esa relación, cuando las sacas de ese contexto y las pones bajo la luz del día, no se ven tan bien”, detalló.
Luego de esta confesión, otras mujeres se unieron a las acusaciones, alegando que el actor tenía fantasías caníbales y sadomasoquistas. En la entrevista El actor admitió haber sido infiel a Chambers, la madre de sus hijos Harper y Ford, con varias mujeres.
“Fui leal durante mucho tiempo, en particular durante los primeros siete años”, apuntó.
Hammer tuvo que someterse a una evaluación psicológica durante el proceso judicial por la custodia de sus hijos. Ese hecho lo marcó muchísimo y a la hora de hablar se conmovió hasta las lágrimas.
“Durante la evaluación, solo me permitían estar con los niños bajo la supervisión de un terapeuta. Recuerdo un momento en que mi hija se me acercó y me dijo: ‘Papá, necesito ir al baño’. Miré al terapeuta, y no se me permitió acompañarla. Tuvimos que pedirle a otra persona que lo hiciera, porque en ese momento no podía estar solo con mi hija. Fue muy difícil. Fue una etapa oscura para todos”, lamentó.
A pesar de todo, la Fiscalía del Condado de Los Ángeles confirmó el año pasado que Hammer no sería acusado de agresión sexual.
“Estoy increíblemente agradecido por todo lo que sucedió. Ahora puedo ser el padre que mis hijos merecen. Puedo darme a mí mismo el amor y la validación que antes buscaba en los demás. Puedo ser un buen ejemplo para mis hijos. También puedo mostrarles que, a veces, cometemos errores y fracasamos”, finalizó.





















