Sara Millerey González Borja, de 32 años de edad, una mujer trans, fue asesinada vilmente el pasado viernes 4 de abril, a las 6 de la tarde en las aguas de la quebrada La García, en el municipio de Bello, departamento de Antioquia.
Lo más impactante es que en las redes sociales se hizo viral su caso, pues en un video grabado por las personas que la encontraron herida, a pesar de verla tan grave, al parecer no hicieron nada para auxiliarla.
Su asesinato ha generado una gran indignación en un país donde el primer trimestre del año dejó alarmantes cifras de violencia contra la población LGBTIQ+.
La joven que era conocida entre sus seres más cercanos como ‘La Millerey’, fue encontrada gravemente herida, quejándose del dolor, es lo que se ve en el video difundido en las redes sociales.
NO NO Y NO. A Sara Millerey la torturaron, le fracturaron sus brazos y piernas para luego arrojarla al río y asesinarla. Pasó en Bello, pasó en Antioquia y no puede volver a pasar en ningún lugar del país.
Las personas trans merecen vivir y vivir dignamente.
— AquinoTicias - José Luis Marín (@AquinoTicias1) April 7, 2025
Y es que las personas que le hicieron daño, de quienes aún no se tiene información, le fracturaron los brazos, las piernas y, después, la arrojaron a la corriente para que no pudiera salir.
Los medios locales reseñaron que Sara pudo sujetarse de unas ramas y pedir ayuda. Después de mucho tiempo dos personas que transitaban por la zona, la auxiliaron.
Hicieron un llamado a los Bomberos de Bello, quienes se trasladaron al lugar y llevaron a Sara al Hospital La María, de Medellín.
Hay días en los que cruzamos la línea roja como país. Nuestra violencia —cruda, despiadada y expuesta— nos sacude y debería detenerlo todo. Hoy mataron a Sara Millerey González Borja en Bello. La forma en que ocurrió es tan atroz que no hay palabras. Solo dolor. pic.twitter.com/l8Rw3wh8Je
Lamentablemente, por la gravedad de sus lesiones, perdió la vida. La mujer antes de morir señaló que unas personas la había arrojado a la quebrada, pero no detalló quiénes ni por qué razón.
Hasta los momentos lo que se sabe es que fue asesinada “a golpes por personas del sector”, dijo José Rolando Serrano Jaramillo, secretario de Seguridad y Convivencia Ciudadana de Bello.
Estas personas después de herirla la arrojaron a la quebrada. “En este momento la Fiscalía General de la Nación y Medicina Legal están realizando todas las investigaciones para determinar las circunstancias en las que se realizaron estos lamentables hechos”.
Rechazo del asesinato
Por su parte, el Ministerio de Igualdad y Equidad rechazó en un comunicado este hecho. “La transfobia mata. El silencio, también. Sara fue víctima de una agresión violenta, deshumanizante y brutal que enluta al país y evidencia la persistencia de violencias estructurales basadas en prejuicios, intolerancia y odio hacia las identidades diversas”.
Asimismo, el Ministerio de Igualdad y Equidad también le solicitó al Ministerio del Interior la convocatoria de una sesión extraordinaria de Mesa de Casos Urgentes, con el propósito de activar la ruta interinstitucional de atención y garantizar el estricto seguimiento al caso.
Acompañamos con respeto y solidaridad a la familia y seres queridos de Sara Millerey. Su vida fue arrebatada en medio de una violencia que se ensaña con las personas trans en Colombia, y que en Antioquia se ha vuelto aún más alarmante.
Igualmente, diferentes organizaciones que trabajan por los derechos de personas LGBTIQ+ en Colombia, rechazaron lo ocurrido.
“Hace parte de una ola de violencia sistemática que enfrentan las personas LGBTIQ+ en el país, en especial las personas trans, quienes siguen siendo blanco de ataques que no solo buscan silenciar sus cuerpos, sino también borrar sus existencias”, revelan en un comunicado Caribe Informativo.
El medio indicó que con el asesinato de Sara Millerey son 24 personas LGBTIQ+ asesinadas en Colombia en lo que va del año.
“La mayoría de estos crímenes -denuncia la organización- ocurren a plena luz del día, en espacios públicos, frente a testigos silenciosos y con la indiferencia o complicidad de muchas personas y autoridades. Esa misma indiferencia fue la que condenó a Sara a no recibir auxilio inmediato”, finalizó.
Alzo mi voz por Sara Millerey, mujer trans brutalmente asesinada. Le quebraron sus sueños, su cuerpo, su vida. No fue solo un crimen, fue un acto transfóbico que nos duele y nos indigna.
La transfobia mata, no más indiferencia y no más silencio.