En una macabra trama que involucra al Ejército de Liberación Nacional (Eln) y a la delincuencia común, Revista Semana reveló recientemente detalles respecto a cómo se planificó y ejecutó el secuestro de Luis Manuel Díaz, cariñosamente conocido como ‘Mane’, padre del futbolista guajiro ‘Lucho’ Díaz.
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Según las autoridades, el oscuro plan comenzó a gestarse desde mediados de año, con la coordinación de Alias Arenca, un antiguo conocido de la familia Díaz y empleado en la escuela de fútbol de don Luis Manuel, y un grupo de guerrilleros del Eln. Según investigadores, la alianza tenía como objetivo que la delincuencia común se encargara de aspectos logísticos y ejecutivos del secuestro, mientras el Eln brindaba apoyo estratégico.
A continuación conozca la cronología detallada de los eventos:
El primer encuentro: el surgimiento de una inusual alianza
Alias Arenca, un viejo conocido de la familia Díaz y entonces entrenador en la escuela de fútbol de ‘Mane’, es contactado por presuntos líderes del Eln. La reunión inicial se lleva a cabo en una tienda a las afueras de Barrancas.
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A partir de entonces, se establece el inicio de la alianza entre el Eln y la delincuencia común, definiendo roles: el Eln proporcionará el punto de control, mientras que la delincuencia común se encargará de logística y ejecución.
Inteligencia y logística
Posterior al primer encuentro, durante julio, alias Octavio, presunto cabecilla del Eln, y Arenca acuerdan la participación de un tercer individuo cuya identidad aún está bajo investigación.
A partir de entonces, se realizan reconocimientos en el pueblo, ubicando la casa de ‘Mane’ Díaz, la de los abuelos y rutas de escape.
Posposición del plan
Aunque inicialmente el secuestro había sido planeado para ejecutarse a mediados del presente año, debió posponerse debido a problemas logísticos, financieros y diferencias internas entre los perpetradores.
La planificación del mismo debió posponerse durante varias semanas; no obstante, la alianza que había surgido se mantuvo en pie y activa.
Reactivación del plan
Finalmente, tras varias semanas de postergación, el 17 de octubre, en una fuente de soda en Barrancas, se reactiva el plan de secuestro.
Participan en el hecho Octavio, Arenca, Marlon (alias Marlon) y un ciudadano venezolano (en adelante ‘el logístico’), así como otras tres personas que aún permanecen en proceso de identificación.
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Entre todos los implicados, programan de forma fría y calculadora la fecha del rapto para el día 28 de octubre, el día previo a las elecciones territoriales.
Engaño electoral
Aprovechando el contexto político y social de las elecciones, alias Arenca persuade a ‘Mane’ Díaz para que asista a una falsa reunión política en el barrio Los Olivos.
La familia, inmersa en la campaña del hermano de Luis Manuel, Gabi Díaz, candidato al Concejo de Barrancas, cae en la trampa.
El secuestro de ‘Mane’
Durante el trayecto hacia la supuesta reunión, Luis Manuel es abordado por un grupo armado.
Dos motocicletas con cuatro sujetos armados ejecutan el secuestro a plena luz del día, encañonando a ‘Mane’ y a otros presentes.
Para evitar que se cometieran errores ese día, ‘Octavio’ delegó a ‘el logístico’ como su representante en el rapto.
De este modo, durante el crimen ‘el logístico’ tuvo el rol de líder; mientras que ‘Arenca’ y ‘Marlon’, según el expediente de la Fiscalía, debían vigilar y seguir a Luis Manuel para reportarle todos los detalles de sus movimientos.
Siendo así que, con base en los reportes de ‘Arenca’ y ‘Marlon’ y a través de ‘el logístico’, alias Octavio ejecutó el secuestro.
Escape y entrega al Eln
Tras una complicada fuga en moto, la llanta de la camioneta de ‘Mane‘ Díaz estalla, obligándolos a improvisar. Los secuestradores optan por dejar a la esposa de ‘Mane’ y continuar con él en moto.
Posteriormente, caminan hacia la serranía del Perijá para entregar al padre de Luis Díaz al líder del Eln, alias Octavio, en la zona de frontera con Venezuela.
Rescate y liberación
Más de 100 investigadores del Gaula lideran la búsqueda, utilizando inteligencia, radiolocalización y seguimientos. Luis Manuel Díaz es liberado después de 12 días y entregado a una comisión humanitaria encabezada por Naciones Unidas y la Iglesia Católica.
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No obstante, a pesar de la exitosa liberación, ‘Mane’ aún lleva las marcas físicas y emocionales de este horrendo episodio.
