En video | Entre el polvo y la mezcla de cemento, Bachillerato de Las Nieves comienza clases
Docentes y estudiantes se quejaron por las condiciones de la sede temporal, mientras que los acudientes cuestionaron la distancia de la otra.
La comunidad estudiantil del Bachillerato de Las Nieves comenzó este lunes las actividades académicas del año escolar, con el traslado de sus útiles a las dos nuevas sedes escolares. Las condiciones en las que se encuentra una de las sedes temporales y la distancia de la otra son el lunar, según manifestaron docentes, estudiantes y acudientes.
En el caso de la edificación que se encuentra en la carrera 16 con calle 21, el patio cubierto por la tierra y las obras que aún se llevan a cabo en este plantel incomodaron a los alumnos y a los profesores.
“Los salones son pequeños y con poca ventilación. Y en el patio para hacer el recreo no nos podemos sentar, porque hay mucho polvo”, manifestó una estudiante de décimo.
Mientras que el representante de los docentes de esta institución, Orlando Molina, se refirió a los problemas de salud que puedan existir por las condiciones de esta sede.
“Estamos haciendo un sacrificio para no perder clases, pero no son las condiciones adecuadas. El polvo nos puede enfermar cada vez que la brisa levante la arena. Estamos con los estudiantes aquí y también hay trabajadores laborando con cemento y con pintura, que eso afecta la salud de nosotros los docentes y de los estudiantes”, manifestó el académico.
Molina agregó que encontraron esta sede sin dispensario de agua y sin servicio de acueducto.
De acuerdo con el profesor, las obras que se están llevando a cabo en este colegio son para adicionar otros salones de clase.
La sede distante
En el caso de la sede localizada en la carrera 20C con calle 27B, no hay quejas por las instalaciones físicas, pero los padres de familia sí ven con preocupación la distancia desde sus hogares hasta este lugar.
Una de las acudientes que llamó la atención frente a esta situación fue Beatriz Guillén, quien reside en la carrera 17B con la calle 6 del barrio La Luz y ahora deberá trasladarse todos los días de clases a esta sede para llevar a su hijo que cursa 6°.
“Ahora mismo no nos alcanza la plata para pagar transporte a diario, porque el colegio no da transporte, ese gasto sale del bolsillo de uno. No estoy de acuerdo con eso”, aseguró la madre.
Beatriz Guillén dio estas declaraciones en un bordillo de la terraza de la sede original de la IED de Las Nieves, mientras pensaba con semblante de preocupación cómo haría para financiar el transporte de su hijo.
“Estoy pensando en retirarlo definitivamente y matricularlo en un colegio que quede cerca para no gastar en buses”, añadió.
Asimismo, la acudiente Sara González se mostró preocupada por el mismo aspecto, teniendo en cuenta que la vivienda donde reside su acudido está ubicada en Rebolo.
“Esto está muy lejos. Nos habían dicho que el colegio iba a poner el transporte y ahora resultó que los padres tenemos que traerlos”, manifestó la madre de familia.
En esta sede se dictan clases para los estudiantes de 6° y 7°, y también reciben a los alumnos matriculados en los cursos de aceleración. Allí se adaptaron seis salones de clase. Mientras que en el otro espacio están los estudiantes de 8° a 11°, donde se conformaron 14 aulas más. De acuerdo con el rector de la IED de Las Nieves, Humberto Jiménez, hay un total de 1.600 estudiantes matriculados en la institución en jornadas de la mañana y de la tarde.
“Hoy (ayer) empezamos la normalidad académica con los estudiantes en las dos sedes. Estamos terminando el trasteo de la sede original para entregarle al contratista mañana (hoy) y que se inicien las obras”, dijo el funcionario, quien indicó que se trató de escoger dos sedes que estuvieran en el perímetro para que los estudiantes de la comunidad desarrollen las actividades. “Sabemos que hay incomodidad, pero también amerita la colaboración de todos”, agregó.
Algunos estudiantes se prestaron para ayudar en el traslado de los útiles escolares desde la sede original, la cual sufrió daños en su infraestructura desde noviembre, cuando algunas láminas de la cubierta del patio principal se cayeron y luego colapsó una parte del plafón en el corredor.
Según el cronograma de la rectoría, las obras estarán listas en seis meses. EL HERALDO llamó a la secretaria de Educación, Bibiana Rincón, para conocer su posición frente a los cuestionamientos de la comunidad, pero la funcionaria no atendió las llamadas.
