La agresión sexual de un cuidador a menores en un hogar del ICBF demuestra que el Estado no cuenta con las capacidades para prevenir hechos tan repudiables.
El sujeto será presentado ante un juez de control de garantías y será imputado por los delitos de acto sexual abusivo y acceso carnal abusivo con menor de 14 años, entre otros.
Los jóvenes, de 16 y 17 años respectivamente, se entregaron a la tropa en el municipio de Calamar, en el departamento del Guaviare.
Los casos de fuga masiva serán evaluados de manera individual por un juez y la comisaría de familia para determinar sanciones.
En el evento hicieron presencia niñas, niños y adolescentes representantes de todo el territorio peninsular, donde se estimula la participación ciudadana, el respeto y el ejercicio de los derechos.