Si bien durante la más reciente conmemoración del Día de la Afrocolombianidad las entidades del Estado, en especial gobernaciones y alcaldías, hicieron masiva piezas publicitarias de apoyo a esta población, la realidad es otra.
Así se desprende de las apreciaciones compartidas por los afro en Sucre, quienes le aseguraron a EL HERALDO que “pese a que es una fecha de regocijo y festejo sobre la resistencia cultural del pueblo negro y de reconocimiento de los aportes a la consolidación de la identidad pluricultural de la Nación, la lucha continua y se siguen haciendo esfuerzos para un total reconocimiento de nuestros derechos y la visibilización e incidencia de los actores, gestores y líderes comunitarios ante las instancias gubernamentales”.
A su vez exigen el cumplimiento a la normativa afro y a la inclusión en planes de desarrollo, al igual que el fortalecimiento de las políticas públicas de esta población en el departamento.
Hablan los líderes afro
Sor Marina Soliz, presidenta de la Consultiva Afro Departamental de Sucre, aseguró que como instancia mediadora entre las comunidades y las diferentes dependencias del gobierno departamental, desde su instalación vienen estableciendo de manera concertada y coherente con las realidades y necesidades del pueblo negro.
A su vez indicó que se tiene que respetar la normativa y deben ser coherentes con la legislación, “sin politiquería y sin abuso del poder frente a los proyectos y las luchas ganadas por el pueblo negro de Colombia, incluido el departamento de Sucre”.
Muchos han sido los alcances de estas gestiones de la consultiva, reconoce su presidenta, pero todavía falta para lograr acciones afirmativas en todo el territorio.
Uno de los alcances que llena a las comunidades afro ha sido el poder caracterizar a instituciones de los municipios de San Onofre, Tolú y Coveñas como instituciones etnoeducativas con todo lo que ello implica, la transición de un PEI a un Proyecto Educativo Comunitario ajustado a las necesidades de las familias, del entorno y de los mismos estudiantes.
No cumplen la Etnoeducación
Para complementar este proceso los afro vienen exigiendo al gobierno departamental y en especial a la Secretaría de Educación de Sucre, el respeto y cumplimiento de lo establecido en el Decreto Ley de la Etnoeducación, docentes de los territorios, comprometidos con el sentir afro y que tengan sentido de pertenencia con las comunidades, con las instituciones y con el arduo proceso afro.
Ante esto han realizado mesas de concertación etnoeducativas en cada territorio, donde analizan las necesidades y exponen la prioridad de docentes de los municipios mencionados, respetando así la territorialidad, en este proceso han realizado 3 encuentros y una gran mesa ampliada en San Onofre donde existe la más alta necesidad de nombramientos y donde las organizaciones exigen el no ingreso de docentes de otros lugares.
Luis Manuel Berrío, miembro del Consejo Comunitario Rebelión de Rincón del Mar, dice que “es absurdo que existiendo recurso humano competente y comprometido con el territorio, nos quieran traer docentes que nada saben del proceso étnico y no tienen compromiso con nuestras comunidades”.
Por su parte Katiuska Ascanio, secretaria de la consultiva y presidenta de la Asociación Afro Bantú de Coveñas, manifiesta el inconformismo frente al desconocimiento de los resultados del proceso de caracterización de las instituciones de Coveñas, que pese a tener mayoría de estudiantes afros registrados en el simat, se empeñen en nombrar docentes regulares y no vinculados al proceso afro en Sucre.
Finalmente lo afro insisten en mayor reconocimiento y empatía política y social con los cientos de líderes sociales y culturales de Sucre “que aunque celebran los procesos de resistencia frente a un país que los invisibiliza, todavía falta más. Necesitamos leernos en los planes de desarrollo, en los proyectos de inversión social, en cultura, en regalías, en mejoramiento de nuestros tejidos sociales, hace falta mucho por hacer y le hace falta a los gobiernos interesarse más en este tema, que para muchos es novedoso, ante la incapacidad de entender los fenómenos de inclusión y de reconocimiento social de nuestras comunidades, pero que requiere de aceptar que la ley nos otorga unas prioridades de inversión y eso no se está dando”.





















