Como si pudiera tocar el firmamento, abrazar las estrellas o incluso flotar entre las nubes. Así se siente la barranquillera Camila Barros, de 16 años, luego de haber sido una de las 25 jóvenes seleccionadas para viajar a la NASA de todo el país, siendo la única elegida en el Atlántico en el marco de la cuarta misión del programa ‘Ella Es Astronauta’, de la Fundación ‘She is’.
Esta estudiante de décimo grado de la IED Madre Marcelina, contará, inicialmente, con un proceso de formación y capacitación previa en temas de astronomía, desarrollo científico, tecnológico, innovación, STEM y empoderamiento femenino durante 4 meses, lo cual le permitirá ampliar su aprendizaje y generar un acercamiento previo con la fundación y el Space Center de la NASA.
Llevar el nombre de Barranquilla a nuevas alturas es ahora su gran orgullo. Su sonrisa refleja el entusiasmo que siente al saber que se transportará en una aventura que siempre había soñado emprender.
“Saber que estoy en representación de Barranquilla es algo realmente que me honra, ya que hay muchas personas que piensan que por ser parte de esta ciudad, no tienen tantas oportunidades. Entonces es como demostrar que así como yo puedo, otras personas pueden y más que eso, soy de un colegio público. Entonces, no tienen que tener tanto dinero para soñar con esto”.
El gran impulso
En diálogo con EL HERALDO, la joven contó que el impulso para embarcarse en esta aventura espacial provino del apoyo incondicional de sus profesores y el comité directivo de investigación de su institución.
Fue su aliento y orientación lo que la llevó a inscribirse en el concurso, sin saber la magnitud de lo que estaba por venir. Este respaldo demostró ser fundamental en el inicio de su viaje hacia las estrellas.
“Sin duda, estoy agradecida con mis profesores y el comité directivo de zona de investigación, ya que me dijeron que me inscribiera, que yo podía ganar. Entonces junto a mí y otras compañeras les dijeron que ingresáramos y al final pude quedar”.
El coordinador de investigación de la institución, Carlos Ramos, ha sido testigo de las grandes capacidades que la han caracterizado.
“Es una estudiante con gran capacidad argumentativa, de pensamiento crítico, una líder innata, una estudiante curiosa. Esa es la puerta de entrada a la ciencia, es una estudiante que sabe trabajar en equipo y todas esas son competencias propias del estudiante del siglo XXI”.
Con expectativas tan altas como el mismo cosmos, Camila espera con ansias las experiencias que le esperan. Desde clases de Robótica e Ingeniería hasta la atención de temas cruciales como la prevención del embarazo y la salud mental.
“Son temas que me dejan sorprendida porque van muy de la mano con el tema que yo quiero estudiar a futuro y es algo que sin duda me va a dar conocimientos previos al momento de enfrentar mi futuro, porque quiero estudiar Ingeniería Aeroespacial”.
Un amor espacial
Para Camila la ciencia es un viaje interminable de descubrimiento y soluciones, una puerta abierta hacia un universo de posibilidades. Su amor por este campo está arraigado en su deseo constante de innovar, de desafiar lo establecido y de buscar respuestas a los desafíos del mundo que la rodea.
“Yo soy una persona que siempre me gusta estar innovando, no quedarme estática ante lo que pasa sino siempre estar investigando, buscando qué se puede hacer y así. Entonces la ciencia es como esas puertas que te dicen que tienes que investigar, nunca te puedes quedar estática”.
Para ella, la ciencia representa una herramienta poderosa para desbloquear el potencial humano y encontrar soluciones a problemas complejos.
“Me gusta estar pendiente de qué se puede hacer, qué soluciones se pueden dar, participar en diferentes concursos y así”.
Camila es la líder de innovación del semillero de investigación en su institución educativa, por medio del cual ha acompañado procesos en el campo de STEM, ciencia y tecnología durante cuatro años.
“Ahora tenemos una idea de hacer un prototipo, que es unos jardines verticales, pero no solamente utilizar plástico, sino fibra de coco, porque al utilizar más plástico siento que ya sería como que algo incoherente en nuestra misión. Vamos a reutilizar pero con plástico, entonces estamos optando por la acción de fibra de coco, ya que es un material 100 % reutilizable”.
El poder de seguir formando a más niñas en el campo científico
Como líder de innovación, Camila destaca la importancia de seguir fomentando el aprendizaje para las niñas en la ciencia. Alentando a las mujeres jóvenes a seguir trabajando hacia sus sueños, Camila les recuerda que cada esfuerzo cuenta, desde lo emocional hasta lo académico.
“Ojalá se sigan formando a más niñas en la ciencia. Les digo que sigan apoyando ese sueño que tengan, que nunca se dejen vencer por los obstáculos que se les presentan en el camino, ya que tú trabajas y ese trabajo siempre te da un fruto”. De acuerdo con la secretaria de Educación, Paola Amar, Camila hoy se convierte en un ejemplo para las niñas y jóvenes barranquilleras.
“Este es un paso significativo en el reto que tenemos de educar a niñas, jóvenes y mujeres en las habilidades del futuro, fomentando su participación en la ciencia, la ingeniería, las matemáticas y la tecnología, áreas que tradicionalmente no tienen una fuerte representación femenina”.
La funcionaria sostuvo que desde las escuelas oficiales se potencia y exploran las habilidades y talentos en estudiantes, para otorgar las herramientas que las preparen para el mundo laboral.
