El recuerdo que Sharay Nashelly dejó en la familia Varela Manga es imborrable, luego de su fallecimiento en Valledupar tras el desplome de una estructura en un salón de eventos en el que se estaba llevando a cabo un matrimonio cristiano el pasado sábado 1 de junio.
Tras las honras fúnebres llevadas a cabo este martes en su natal Barranquilla, familiares y amigos siguen teniendo presente la huella que les dejó la niña de 13 años, quien según pudo conocer este medio de comunicación, soñaba con ser psicóloga.
Yeimi Esther Monsalvo, su familiar, habló con EL HERALDO sobre cómo han afrontado estas últimas horas sin la presencia de su pequeña y cómo era quien fomentaba la alegría en el hogar.
“Sharay Nashelly Varela Manga es una niña que llegó a nuestra familia a los dos años. Recuerdo que yo era novia de mi esposo, en ese entonces era el año 2015. Mi suegra (María Manga) se volvió loca, era su muñeca. Fue una alegría para la familia. Creció siendo alegre, espontánea y muy inteligente”, mencionó inicialmente.
“Recuerdo que decía las propagandas de una manera muy graciosa, nos hacía reír con sus ocurrencias. Con solo tres años, se aprendía los cuentos que uno le decía por primera vez para luego repetirlos como si estuviese leyendo, pero no sabía leer (risas). Era demasiado amorosa, se daba con todos”, agregó.
Yeimi Esther aprovechó para dar las gracias a todos los que han estado pendientes de su familia en estos momentos: “Realmente estamos agradecidos por el apoyo y el acompañamiento de todas las personas que fueron a consolarnos. Vimos a muchos en la funeraria. Sus compañeras del colegio la amaban. Recibimos cartas donde una en particular le decía que le había enseñado a confiar en ella misma, a conocer su identidad y su valor. Eso nos ha llenado de alegría, que haya dejado lo mejor en nuestros corazones y en el de los demás”.
La voz de la familiar de Varela Manga se empezó a entrecortar apenas recordó aquella trágica escena del matrimonio. El saber que una de sus confidentes —como la consideraba— ya no está es algo que la llena de mucha nostalgia.
“Sabemos que Sharay está en un mejor lugar, la vamos a extrañar muchísimo. Es muy duro llegar a esta casa y ver sus cosas. No es nada fácil, pero tenemos a nuestro espíritu santo, él es quien consuela y le ha dado la fortaleza necesaria sobre todo a mi suegra María Manga”, afirmó Monsalvo asegurando también que su comida favorita eran las pastas y le encantaba compartir con sus amigos de la iglesia.
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“Sharay está en el cielo, está con Dios. Ella decidió entregarle su vida. Tuvo un encuentro, se bautizó y no tenemos dudas de que está allá. Ganó la carrera y el Señor cumplió el propósito de su vida”, añadió.

Hechos
El repentino episodio dejó un saldo de 43 personas heridas, de las cuales 11 aún permanecen bajo observación médica en centros asistenciales de Valledupar. Esto sin ignorar el fallecimiento de Naileth Guerra Ochoa, de 22 años, quien era una de las damas de honor. Un panorama que seguramente nunca imaginaron Camilo Andrade y Edeb Shaday Calderón Rosales en el día más importante de su vida.
De hecho, la pequeña Sharay Nashelly asiste al matrimonio, pues su madre adoptiva María Manga es tía de Edeb Shaday, la mujer que se estaba casando. Ella por sus redes sociales no escondió la tristeza que ha sentido por lo sucedido.
Yeimi Esther relató que, entre otras cosas, al viajar desde Barranquilla llegaron al tarde a la ceremonia. Recuerda que la lluvia empezó a caer fuertemente, pero centraron su atención en el evento. Al estar en la mesa, su esposo fue el que se percató de que se estaba filtrando el agua desde el techo. Como cosas de la vida, todos los padres estaban pendientes de los niños —ella no era la excepción—. Su hija le pidió ir a jugar, pero le negó el permiso. “Sharay se había levantado de nuestra mesa para sentarse al lado de las primas”, alcanzó a aclarar.
“Mi esposo me dijo que mirara hacia arriba, que se estaba metiendo el agua. Sentí un estruendo y la luz se apagó, pero volvió enseguida. Cuando de un momento a otro veo que se viene el agua y el techo. Lo único que hice fue tirarme al piso. Realmente dije Jesucristo hasta aquí llegué”, contó.
“A mi esposo le dio tiempo de coger a nuestro bebé, lo abrazó y se metió bajo la mesa. Mi suegra tomó a la otra niña, también se cubrió con una mesa. La verdad me olvidé de todo y solo miré cuando mi suegro partió un vidrio para que todos saliesen por ahí. Cuando estábamos afuera fue que empezamos a preguntar por los demás”, explicó también diciendo que todavía tiene en su mente el recuerdo de ver a todos con sangre.
Monsalvo argumentó que “realmente vieron la mano de Dios, pues era una tragedia que pudo haberlos matado a todos”. “Pensamos que Sharay estaba con una tía y por eso no nos preocupamos. Lastimosamente quedó debajo de los escombros, fue una muerte instantánea, pues al igual que la dama de honor (Naileth Guerra) recibió la peor parte”, sostuvo.

Clamores
La familia Varela Manga todavía se encuentra preocupada por el estado de salud de varios asistentes al matrimonio. “Nuestros familiares en general siguen recuperándose. Uno llamado Luis David aún está hospitalizado, se partió tres costillas y se perforó el pulmón. Gracias a Dios respondió bien a la cirugía. Otra tiene una operación pendiente en la columna. A mi cuñada ya le dieron de alta, le tomaron diez puntos en su cabeza. A mi niña le dieron de alta al día siguiente por sus punticos en la cabeza. Y así tenemos a más familiares, sabemos que Dios se va a glorificar en medio de sus recuperaciones”, subrayó Yeimi.
En lo que sí han tenido dudas es en la recuperación de las pertenencias que quedaron al interior del salón de eventos desplomado. Nadie les da respuesta y tampoco saben dónde reclamarlas. Hasta estos momentos intentan comunicarse con las autoridades.






















