El general Edwin Urrego, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, confirmó al mediodía de este lunes 6 de octubre el traslado a la URI de la Fiscalía de Eduar Alfonso Castro Daza, alias Máquina o El Negro, el sujeto que se entregó en horas de la madrugada en la Estación de Policía del barrio El Bosque y afirmó ante uniformados de esta dependencia haber acribillado a Kelly Johana De Arco Hurtado, de 34 años, su expareja.
El alto oficial, presente en la entrega de un CAI en la urbanización Puerta Dorada, en la localidad Metropolitana de Barranquilla, la misma en donde se registró el feminicidio de la mujer, dio algunos detalles del hecho ocurrido en el conjunto residencial Metro Centro.
Según la autoridad, Eduar Castro habría ingresado al conjunto con una llave que portaba y esperó a que la mujer llegara hasta la propiedad, pasadas las 12:00 de la madrugada. Cuando la mujer caminó hacia el bloque siete, en dirección al apartamento 501, fue detenida por Eduar y en escaleras del área común la impactó en unas seis oportunidades, ocasionándole la muerte en el lugar.
Las detonaciones alertaron a los vecinos del conjunto y, en medio del caos, el sujeto se escapó. Al parecer tomó una moto y la condujo con rumbo desconocido.
“Una hora y media más tarde (1:30 a. m.) ahí se presenta en las instalaciones de la Estación de Policía El Bosque, haciendo entrega del arma de fuego”, detalló el comandante.
Frente a la supuesta vinculación de Castro Daza con la estructura criminal ‘los Costeños’ explicó que fue una “información que recibimos en el lugar por personas que lo conocen y que nos manifestaron que es miembro de los costeños”.
En lo que sí hizo énfasis el comandante es que Eduar Castro Daza tenía anotaciones judiciales por el delito de homicidio (enero de 2015), porte ilegal de arma de fuego (marzo de 2014), y lesiones personales (febrero de 2013).
Ahora, luego del crimen, volvería a ingresar a la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, URI, por el delito de porte ilegal de arma de fuego y el caso de feminicidio entraría en un proceso de estudio por una agencia fiscal, en sentido que la captura del sujeto no se dio en flagrancia.
Finalmente, el general mencionó que el pasado sábado 4 de octubre, la víctima fatal y el presunto victimario habrían tenido un episodio de violencia, pero este no fue denunciado.
Al parecer, Kelly De Arco y Eduar Castro Daza tuvieron una relación de al menos dos años y hacía un par de meses habían terminado. Sin embargo, el sujeto seguía acosando a la hoy occisa.
Esta versión del acoso hoy toma fuerza y sería una de las líneas investigativas que entraría a trabajar el ente investigador.
La diputada Alejandra Moreno Astwood, presidenta de la Comisión Legal de Mujeres de la Asamblea Departamental del Atlántico y miembro de la Bancada Púrpura del Atlántico, a través de su cuenta de X, señaló: “otro feminicidio en Barranquilla que pudo evitarse. Kelly Johana cambió de casa para buscar tranquilidad lejos de su ex pareja, a quien le insistió que no quería seguir con él. Aun así él la persiguió, la golpeó y la amenazó; y a la media noche después de esperarla por horas, Eduar le disparó. La ruta de atención y prevención de violencia volvió a fallar. Ella requería ser salvaguardada y no quedar a expensas de su victimario”.