Vallenato, salsa, reguetón, champeta y folclor sonaban al unísono en la primera gran verbena de Carnaval, Baila la calle. Entre las nueve cuadras del Par Vial de la carrera 50 estaban dispuestas varias tarimas para los bailadores el pasado viernes. Además de un completo menú gastronómico y artesanías a la venta y de decoración.
Limitada por vallas estaban los 450 metros que comenzaban en Murillo y llegaban hasta la Plaza de la Aduana, custodiados además por la Policía Metropolitana de Barranquilla, que garantizó el orden y la seguridad del jolgorio. El Carnaval volvió a la calle como era tradición en los barrios populares de la ciudad, y hubo baile para todos los gustos.
Aunque las puertas se abrían a las siete de la noche, los más carnavaleros comenzaron a llegar desde las cinco de la tarde. 'Esto es lo nunca antes visto. Cómo no los íbamos a perder', dijo en medio de pases de salsa Doris Ángulo, quien a sus 68 años todavía mantiene fuertes las piernas para 'bailar hasta que se acabe la fiesta'. 'Es un ambiente familiar y seguro, como los viejos tiempos'.

La pista de baile más grande de Barranquilla le dio la bienvenida a propios y extranjeros. Personas de distintos barrios y sectores de la ciudad llegaron con sus familias o amigos a gozar en víspera de Carnaval. Pero también grupos de extranjeros que por primera vez visitan Colombia. Como Anabel Cantú, Carlos Patillo y Esteban González, quienes desde México volaron a conocer el patrimonio Caribe.
'Estuvimos en la coronación de la reina, sus tradiciones son muy vistosas y bonitas. Esta fiesta está genial, nunca había ido a una de este tamaño. Así que solo esperamos con ansias la Batalla de Flores mañana', expresó la instructora de baile Anabel.
O como un grupo de seis jóvenes holandeses que se deleitaban con la comida típica de la Costa: hayacas, chicharrón, bollo y butifarra estaban sobre la mesa. Pero la carta era larga. Ocho restaurantes como Narcobollo y Cucayo, ocho food trucks y stands de vecinos del sector completaban una larga lista de delicias gastronómicas: fritos, sopas, picadas de carne, comida árabe, chuzos y mucho más.
Entre los aromas, el del puesto de Angélica Herrera atraía al que pasara por el frente. Con las costumbres propias de su tierra, San Basilio de Palenque, preparó en carbón un sancocho trifásico (pollo, carne y cerdo) para el enguayabado o para el que comenzaba. Cinco de los 40 integrantes de su grupo Kinini Danza Negra promocionaban el plato con ritmo de mapalé. Además, vendía trenzas, una especie de balaca colorida que significa 'la unión de los pueblos afrodescendientes'.
Otras artesanías alusivas a la época también contaban con un espacio propio dentro de Baila la calle. Zapatos, sombreros, bolsos, camisas y accesorios se podían encontrar. Y en un tramo del Par Vial de la carrera 50 estaban dispuestas las mini carrozas elaboradas por estudiantes de la Escuela Distrital de Arte que se estrenaron en el desfile de Guacherna.
Como si no fuera poco ya, al final del lugar, con el edificio arquitectónico de la Aduana de fondo, estaba la tarima principal donde grupos de la región enseñaron con música la identidad Caribe. Juventino Ojito y los Reyes del Porro y Fundación Chandé de Gamarra (Cesar) llevaron el folclor con millo, tambor y guacharaca. La cuota urbana la pusieron Sonny & Vaech con reguetón.
En medio del concierto llegó a Baila la calle la soberana de todas las parrandas carnavaleras y de su tradición, Stephanie Mendoza Vargas, para contagiar de alegría al público. 'Este es el evento que estábamos esperando, el que les prometimos a todos los bailadores, a los que aman el folclor. Vacílense esta fiesta que es para y por ustedes. Disfruten, y recuerden que después de los desfiles la cita es aquí', dijo. La soberana se movió al ritmo de baile cantao y cumbia, y al son que Lisandro Polo, rey Momo en 2016, le puso tocando con una hoja de limón.
El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano De la Rosa, también llegó al jolgorio donde invitó a los barranquilleros a seguir la fiesta en paz. Así transcurrió la primera noche de la verbena carnavalera, en orden y sin altercados.

Agenda de domingo
Este domingo es el cierre de Baila la calle, y las puertas estarán abiertas desde las cinco de la tarde para que quienes disfrutan la Gran Parada de Tradición puedan terminar en la verbena.
Entre los artistas que estarán en tarima se destacan el grupo folclórico Kasimbafrica con el mapalé de Las Perlas del Negro, Luifer Duque, La Big Band de Pacho Galán, la Banda de Chochó y Aníbal Velásquez.
Asimismo, Carnaval S. A. rendirá homenaje póstumo a Rufo Garrido y al ‘Príncipe del Carnaval’, Checo Acosta, por su trayectoria artística y su aporte musical a la fiesta.





















