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La economía barranquillera ha logrado evolucionar positivamente, logrando crecimientos en siete de sus indicadores, con lo cual consiguió un mejor comportamiento que sus pares de Cartagena y Santa Marta, de acuerdo con el último informe del Semáforo Económico Regional de Fundesarrollo.

En efecto, el desempleo tuvo una baja, al pasar del 10,1% al 9,0%. Esto la convirtió a nivel nacional en una de las ciudades con menores tasas.

Las importaciones barranquilleras subieron de US$1.746 a US$1.901 millones. El movimiento portuario concluyó el 2010 con 4.068.596 toneladas, frente a 3.326.393 en el 2009.

La construcción consiguió terminar el año con 448.919 metros cuadrados, frente a 440.045 metros cuadrados en el período anterior.

El consumo de gas natural se subió de 78.814 pies cúbicos a 85.648 pies cúbicos que hubo el año pasado.

El aeropuerto Ernesto Cortissoz logró movilizar 1.419.894 pasajeros en el 2010, cuando en el 2009 se llegó a la cifra de 1.030.106 personas.

La ocupación hotelera tuvo un excelente comportamiento, pese a que el año pasado entraron en operación nuevos hoteles en la ciudad. Se pasó del 49,1% al 57,3% en ocupación.

Los únicos lunares de la economía barranquillera fueron la subida de la inflación, al pasar de 1,80% al 3,38%, y la baja en las exportaciones totales, al pasar de US$1.066 millones a US$970 millones en el 2010.

El director ejecutivo de Fundesarrollo, Ricardo Plata, manifestó que se resalta el dinamismo del sector turístico y el movimiento portuario'.

Señala que Barranquilla y Cartagena evolucionaron de mejor forma en su actividad económica, 'registrando un comportamiento positivo en siete de sus nueve variables'.

Cartagena logró duplicar sus exportaciones, al pasar de US$1.292 a US$2.332 millones, sin embargo el área licenciada para construcción tuvo una disminución.

Santa Marta arroja un comportamiento económico desfavorable en cuatro de sus nueve variables analizadas.

Por Redacción Económica