Las inversiones de Compas en su terminal portuario en Barranquilla ascienden a los USD30 millones, los cuales se destinaron a la ampliación y modernización de su operación.
Santiago Valderrama, gerente de Compas Barranquilla, dijo que entre las inversiones realizadas se destaca la modernización de la línea de muelles con cuatro posiciones de atraque que le permiten atender cuatro buques de manera simultánea.
Además, se cambió la banda transportadora de carbón a una que permite cargar 800 toneladas por hora, con un cargador móvil que no requiere que el barco se mueva de su posición para cargar sus bodegas, lo que genera menos tiempos y más eficiencias.
'Somos un terminal multipropósito, movemos carbón, coque, fertilizantes, aceros, líquidos y somos una de las pocas plantas certificadas en la Costa Caribe para movilizar combustible de avión. Con nuestro aliado Bravo Petróleo tenemos una planta de combustibles líquidos donde manejamos hidrocarburos', agregó.
Tanto la pandemia como las condiciones de navegabilidad en el canal de acceso al Puerto de Barranquilla han sido aspectos críticos para el sector a nivel local.
'Nos hemos visto afectados en la importación de acero, la cual se redujo en casi un 30% y en líquidos, especialmente en combustible de avión, pues desde marzo y hasta septiembre no se había hecho una nueva importación y permanecía almacenado porque los aviones estaban en tierra'.
Detalló que en el terminal de Barranquilla movieron cerca de 1,1 millones de toneladas en 2020, cifra que representa una reducción de 170 mil toneladas frente a las movilizadas en 2019.
Esta reducción se explica por los efectos de la pandemia y a la necesidad de desviar barcos a las terminales que tienen en otras ciudades de la región por las condiciones del canal.
Valderrama aseguró que las proyecciones para este año son moderadas y esperan manejar los mismos volúmenes que en 2019. 'El mercado ha reaccionado favorablemente desde la reapertura y se han reactivado proyectos del Gobierno nacional, lo que ayuda a acelerar la economía con la construcción y las importaciones de acero. Con los aeropuertos abiertos hay más importaciones de combustible de avión', precisó.





















