Kasbleidis Olivares, una soñadora de los cuadriláteros
La jueza barranquillera, de 33 años, se convirtió en la primera mujer que alcanza la certificación internacional tipo uno en el boxeo nacional. Su objetivo es poder ir a unos Juegos Olímpicos.
Rodeado de hermosas playas y arropado por el inclemente sol, hay un tesoro escondido en el sur de Turquía que muchos alegan que es una maravilla del mundo. Su nombre es Kas y su principal característica es ser un pueblo que día tras día recibe miles de turistas con la curiosidad de conocer sus interiores.
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Puede que esta no sea una crónica para elogiar lo blanco de la arena turca, pero de allí se inspiró un nombre que ya comienza a dejar en alto a Colombia. Kasbleidis Olivares Aguilar se ha convertido en la primera mujer que alcanza la certificación internacional tipo uno en el boxeo nacional.
Acostumbrados a destacar los logros o títulos de los deportistas, el juzgamiento boxístico también se hace hueco en la historia del país. Aquellos que una vez que se acaba la contienda pasan a la historia, también tienen sueños y objetivos como los que se llevan todos los reflectores.
Así es la historia de Kasbleidis, quien a pesar de no crecer entre una familia de deportistas, fue sumergida en los cuadriláteros desde muy niña y hoy goza de tener el privilegio de haber alcanzado un logro que ninguna otra mujer ha podido arañar.
“Estoy llena de orgullo. Fue un logro grande pasar de árbitro nacional a internacional. Es una meta que tenemos todos los que nos dedicamos a esto y alcanzarlo te hace sentir una gran alegría”, declaró a EL HERALDO.
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Son muy pocos los relatos que describen el transcurrir de una jueza boxística. Una vida llena de sacrificios y disciplina, tal cual como lo hacen los púgiles. Kasbleidis se levanta temprano todas las mañana para, con su trote cotidiano, mantener su cuerpo en forma. Se sienta en su hogar, le invierte tiempo a los combates y analiza minuciosamente cada cambio en los reglamentos. Todo mientras trata de mantener a flote su carrera de asesora financiera. Un ritmo sin descansos.
La pasión por el boxeo es la gasolina que ha necesitado para no detener su marcha. No es poca. Wulfren Olivares, su padre, y uno de los más respetados jueces en Colombia —dijo presente en los más recientes Juegos Olímpicos—, se encargó de discipularla por este camino. La llevaba de pequeña a todas sus peleas.
Los asistentes se emocionaban por la gran cantidad de golpes; no obstante, la pequeña solo se la pasaba tratando de identificar cuándo estos eran legales. Aquellos que pegaban por encima del ombligo eran sus favoritos.
“El árbitro tiene la clara función de no permitir que los boxeadores se lleven un castigo innecesario. Hacer cumplir las normas y evitar empujones, pisones, mordiscos. Todo va más allá de lo que ve el espectador. Personalmente, me encanta sentir la adrenalina de estar con ellos en el ring”, puntualizó.
La certificación internacional de árbitros tiene tres niveles, siendo el último de ellos el más prestigioso de todos. Hablamos de los jueces que asisten a los eventos más importantes de este deporte, caso del padre de Kas. Ella apenas se adjudicó la primera, pero aspira a seguir por el camino que ha trazado su progenitor.
“Mi sueño es tener la certificación tres estrellas e ir a los Juegos Olímpicos. Hacer un muy buen papel y dejar en alto el nombre de mi país. Hay deportistas que entrenan todos los días para obtener un título mundial o un campeonato, así también para nosotros esto es lo más importante”, expresó.
Aquella joven que debutó en unos juegos departamentales, con el miedo apoderándose de ella, hoy ya piensa en inscribir su nombre en las grandes citas. Kasbleidis Olivares no se colgará las medallas en el cuadrilátero, pero si permitirá que las peleas se desarrollen de la mejor manera.
Tener la certificación de árbitro internacional en el boxeo no es sencillo. Es un proceso largo que empieza desde las ligas locales en cada departamento. Se inicia siendo juez distrital, luego departamental y finalmente nacional. Después de ello, se realizan un par de cursos fuera de Colombia y, contando con los números de peleas solicitadas, se puede aplicar.
