El barranquillero que aspira a la Alcaldía de Miami-Dade

Alfred Santamaría Linero se enorgullece de haber nacido en Barranquilla. Es amante del lado más cultural del Carnaval y, como buen costeño, le deleita saborear unas butifarras y un mote de queso. A los 13 años, en compañía de sus padres misioneros, salió del país rumbo a Estados Unidos, donde empezó a trabajar con sectores religiosos y posteriormente se incorporó a entidades de ayuda humanitaria.

El hombre de 35 años cuenta que, desde niño, empezó a sentir una fuerte atracción por los asuntos gubernamentales. Su función en organizaciones sin ánimo de lucro le permitió adquirir conocimientos políticos. A la edad de 21 comenzó a trabajar como asistente en la Alcaldía Mayor del condado de Miami-Dade, a la que aspira llegar el próximo 30 de agosto.

Para conseguirlo, Santamaría deberá convencer al electorado, que abarca aproximadamente 1,3 millones de votantes de los casi 2,5 millones que habitan en Miami-Dade, además de superar a Raquel Regalado, hija del actual alcalde de la ciudad de Miami, el cubano Tomás Regalado.

Señala que durante su trayectoria en la política norteamericana también ha trabajado en el Congreso, como enlace con la comunidad, y con la Gobernación de Florida, a través de un programa que entrega fondos a pequeños comerciantes latinos. Ese recorrido le ha permitido adiestrarse en materia gubernativa, lo que lo indujo a aspirar al principal cargo del condado.

Forjar alianzas. En su última visita a la capital del Atlántico, Santamaría asegura haber estrechado vínculos con el alcalde del Distrito, Alejandro Char y no dudó en manifestar que, en caso de vencer, trabajará “con ímpetu y compromiso para abrir puertas” a Barranquilla en territorio estadounidense.

“Si ganamos las elecciones, Barranquilla y Miami-Dade firmarían una hermandad genuina, no de papeles sino de gestiones reales. La comunidad tendrá acceso a una persona que velará por el bienestar de todos. Me convertiría en un embajador del Carnaval y de intercambios académicos en beneficio de los barranquilleros”.

De la misma forma, Santamaría explicó que el condado dispone de recursos que pueden ser destinados a proyectos de interés. En su opinión, lo más importante es “tener una relación y una plataforma con la ciudad”, por lo que asevera que desea convertirse en el vínculo entre ambas ciudades.

Detalles del condado
El presupuesto actual de Miami-Dade, de acuerdo con el aspirante a la Alcaldía, asciende a 6.800 millones de dólares. El condado tiene más de 35 localidades (entre ciudades, poblados y villas) y su población está tasada en 2.600.000 habitantes.

Santamaría sostuvo que en los últimos veinte años el abstencionismo ha rozado el 85 %, situación que atribuye a la “falta de ofertas integradoras” de candidatos en las últimas décadas. En virtud de lo anterior, se ha trazado una meta ambiciosa: movilizar medio millón de votos para alzarse con la victoria en el condado.