La directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Lina Arbeláez, alertó sobre delincuentes que haciéndose pasar por funcionarios de la entidad pretenden raptar a menores de edad.
El pronunciamiento de la entidad se conoció luego de que dos hombres y una mujer ingresaron a una vivienda en el municipio de San Antero, Córdoba, con el pretexto de retirarle la custodia a una madre de familia de esa población.
Los tres delincuentes dijeron ser funcionarios del Bienestar Familiar, por lo que la sorprendida víctima de este falso procedimiento prendió las alarmas entre familiares y amigos.
'El rescate o retiro de un niño o niña de su lugar de residencia procede únicamente con la orden expresa de una autoridad administrativa o judicial que debe entregarse a su cuidador al momento de la diligencia', declaró el ICBF a través de un comunicado tras conocer los hechos.
La entidad también reiteró a los padres de familia que deben estar atentos ante cualquier situación que involucre a sus hijos, y que no duden en comunicarse a las líneas 141 y 018000918080 para resolver inquietudes respecto de los procedimientos que adelanta la entidad, puntualizó.
Los hechos
El caso del intento de rapto del niño ocurrido el miércoles en la tarde fue puesto en conocimiento de las autoridades en San Antero, luego de que la madre del menor diera aviso a otros familiares sobre el sorpresivo procedimiento del que no había sido notificada previamente.
La Comisaría de Familia del municipio indicó que los hechos se presentaron en el barrio Polo Norte, en el casco urbano del municipio, hasta donde llegaron tres personas, dos hombres y una mujer, a bordo de una motocicleta.
Según lo narrado, los desconocidos se presentaron como funcionarios del ICBF.
'Le comentaron a la progenitora que ella no tenía las garantías para cuidar al menor, y debido a esa situación procederían a llevárselo para ponerlo bajo custodia del Instituto', señaló la Comisaría.
Pese a la presión ejercida por los falsos funcionarios, la progenitora avisó a varios familiares y vecinos del procedimiento por parte de los tres delincuentes, lo que al parecer intimidó a los impostores, que rápidamente abandonaron la zona con el pretexto de volver más tarde.
Alarmada, la madre se acercó a la Comisaría de Familia para pedir información sobre lo ocurrido, pero le confirmaron que no existe ningún proceso en su contra.
