Colombia

Cayó alias Jhonnier, ficha clave de Gentil Duarte e Iván Mordisco

El cabecilla de las disidencias, por quien se ofrecía una recompensa de $3 mil millones, fue muerto por la fuerza pública en Toribío, Cauca.

El presidente Iván Duque informó este lunes sobre la muerte a manos de la fuerza pública del cabecilla de las disidencias de las FARC, Euclides España, alias Jhonnier, ficha clave de los comandantes Gentil Duarte e Iván Mordisco.

“Queremos informarle al país que en una operación conjunta de nuestras Fuerzas Militares y Policía, con el apoyo de la Fiscalía, fue neutralizado el cabecilla de las disidencias de las FARC, Euclides España, alias Jhonnier, en el corregimiento de Tacueyó, Toribío, Cauca”, reportó el jefe de Estado desde la Casa de Nariño y acompañado de la cúpula militar.

“Este símbolo del mal, por quien había una recompensa de $3 mil millones, es responsable del asesinato de líderes sociales, extorsiones y narcotráfico. Además, es una ficha clave de alias Gentil Duarte y de Iván Mordisco, a quienes también les seguimos la pista”, agregó el mandatario.

A su vez, el ministro de Defensa, Diego Molano, también presente en la declaración, advirtió que alias Johnnier tenía "más de 25 años de trayectoria criminal. No importa dónde se escondan, siempre los encontraremos. No cederemos ni un milímetro para que llegue la tranquilidad y la seguridad a todo el país".

Las acciones fueron adelantadas por el Comando Conjunto de Operaciones Especiales, unidades de la Policía Nacional y en coordinación con fiscales especializados, comisionados para hacer efectiva la detención del cabecilla.

El mandatario se refirió a esta operación como “uno de los golpes más importantes que se le propicia las disidencias de las FARC", ya que Johnnier era considerado una amenaza para la seguridad en los departamentos de Cauca, Nariño y Valle del Cauca.

“Estamos hablando que alias Jhonnier, el terror del suroccidente, como se hacía llamar. Pero, adicionalmente, era quién orientaba las acciones de criminales como alias Mayimbú, a quién también le vamos a caer más temprano que tarde”, añadió el presidente.

El prontuario del cabecilla muerto de las disidencias incluye homicidios contra líderes sociales y personas en proceso de reincorporación, extorsión, actos terroristas, como el reciente atentado a dos patrulleros de la Policía, en el municipio caucano de Santander de Quilichao y tráfico de drogas.

“Este bandido venía también intimidando a comunidades indígenas, y también amenazando a consejos comunitarios”, advirtió Duque.

El comandante general de las Fuerzas Militares, el general Luis Fernando Navarro, explicó que la operación se efectuó en el marco de una estrategia encaminada a desarticular los planes criminales de las disidencias, priorizando a los principales cabecillas de estas organizaciones que tienen como actividad principal el narcotráfico.

También explicó que el Comando Conjunto de Operaciones Especiales estuvo integrado por personal de la III División del Ejército, de la Fuerza Naval del Pacífico, del Comando Aéreo de Combate Siete y el apoyo de unidades de inteligencia e investigación criminal de la Policía.

“Lo logramos ubicar en un área rural del municipio de Toribío. Y de manera puntual lanzamos esta operación hace 25 días con una inteligencia puntual de la Policía Nacional, un trabajo efectivo de las Fuerzas Especiales del Ejército y comando y control muy determinado del Comando Conjunto de Operaciones Especiales”, indicó Navarro, agregando que se utilizaron plataformas de última tecnología para apoyar las labores de inteligencia y permitir el avance de las tropas en horas nocturnas.

Y el director de la Policía, general Jorge Luis Vargas, señaló que la recolección de información de inteligencia se extendió por varias semanas, hasta conseguir la ubicación precisa del cabecilla de las disidencias a quien se refirió como un “narcotraficante puro”.

Aseveró además que este hombre “es el responsable directo de dar las instrucciones para que nuestros dos compañeros de la Policía Nacional estén lesionados hoy en Santander de Quilichao, a través de la estructura narcotraficante Dagoberto Ramos”.

Y también le achacó la responsabilidad de la explosión de un carro bomba frente a la Alcaldía en Corinto, y de múltiples ataques a instalaciones militares y policiales en el Cauca: “Era el cabecilla delincuencial de siete estructuras que venían cometiendo actos de quema de vehículos, de impedir el tránsito de las personas entre municipios, responsable de lesiones de policías; más de 46 policías han resultado lesionados por las instrucciones directas de este delincuente”.

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