Avanzar en la implementación del proyecto 'Plan Pescao' es uno de los objetivos en el Atlántico, pues este plan nace ante la sobreexplotación de Lisa y Lebranche, especies catalogados como vulnerables en las ciénagas del Caribe colombiano, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza UICN.
'Plan Pescao' busca la recuperación y conservación de especies nativas migratorias como las mencionadas, que se encuentran en estado de amenaza.
La Corporación Autónoma Regional del Atlántico (C.R.A), expone que es 'prioridad avanzar' en este componente ambiental y el marco del proyecto que se ejecuta en alianza con la AUNAP, la Gobernación del Atlántico, el departamento de Bolívar, la alcaldía de Santa Catalina, la Gobernación de Bolívar, el Ejército Nacional y las asociaciones de pescadores del departamento de ambos departamentos.
Su objetivo va más allá de repoblar los cuerpos de agua con 12 millones de alevinos anualmente. 'Plan Pescao', que este año llega a su tercera fase, inició en el año 2020 y tiene como meta el repoblamiento de un total de más de 36 millones de alevinos durante los tres años en los cuerpos de agua del Atlántico.
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Su misión de este año es preservar la diversidad de estas especies y es una 'estrategia' que permite generar un equilibrio ecológico para los cuerpos de agua, en Atlántico y Bolívar.
En Atlántico, son 9 mil pescadores continentales y alrededor de 11 mil pescadores costeros; mientras que, en Bolívar, en el punto de extracción, se encuentran entre 5 a 7 mil pescadores.
El Director de la C.R.A, Jesús León Insignares, indicó que 'lo que se está haciendo es traer estas especies, que provienen de cuerpos de agua de Bolívar, en consenso con las autoridades y con los pescadores, son trasladas hacia nuestros cuerpos de agua en el Atlántico, pero también gana Bolívar, ganan los ecosistemas de ambos territorios, que, aunque son diferentes, comparte nuestro cuerpo de agua más importante, la ciénaga del Totumo'.
Eddien De la Ransl, funcionario de la Autoridad Nacional de Pesca, explica que 'actualmente, se puede ver que muchas de estas especies cuando hacen sus procesos migratorios no encuentra los canales de acceso hacia las áreas continentales, por lo tanto, de su parte generan este programa y trasladan esas especies que están buscando las ciénagas y las zonas costeras hacia el continente. Y también garantizan así la seguridad alimentaria para los pobladores y para las asociaciones de pescadores que participan en este proyecto'.
'Nosotros nos encargamos del tema logístico del proyecto, brindamos todo el apoyo con los elementos de equipos transportadores y con el personal técnico del Bajo Magdalena, que es la estación que se encarga de la producción de alevinos, para la seguridad alimentaria de todo el Caribe colombiano. Así mismo, hacemos un seguimiento a la extracción con nuestros compañeros que son instructores de pesca que están en las áreas revisando y haciendo controles al uso del recurso', indicó el funcionario.
El proceso de recolección y repoblamiento de los alevinos se cumplía en seis cuerpos de agua; mientras que este año, se incluyeron dos nuevos humedales, que son la ciénaga el Uvero y El Lago del Cisne.
Así lo confirma el médico Veterinario de la C.R.A, Iván Peláez, quien además cuenta que el proceso de siembra dura 20 días, arranca muy temprano, a las 6:00 de la mañana en Lomita Arena.
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'Allí hacemos la captura de los alevinos, en un punto que es una barrera física que ellos no pueden cruzar; los capturamos allí y los ayudamos a pasar al otro lado de la ciénaga, y con la asistencia técnica de la AUNAP y el apoyo del Ejército, los llevamos a los diferentes cuerpos de agua en tanques aireadores, en donde hacemos la respectiva siembra', indicó el médico.
Por su parte, Liceth Jiménez, integrante de la Asociación de pescadores del Atlántico, contó que su participación en el proyecto le permite mejorar la calidad de vida de las personas y el entorno.
'Me siento feliz porque estoy ayudando en la causa, contribuyendo con el medio ambiente y ayudando a que las especies sigan reproduciéndose. Ahora podemos dejarlos que crezcan ayudamos a las demás ciénagas, para que ellos no se mueran aquí y puedan reproducirse en otras ciénagas. Tengo tres hijos, mi esposo también es pescador y vivimos de la pesca, muchas veces también cultivamos, pero más que todos vivimos de la pesca', explicó.
