El cierre de la edición 58 de los Premios Grammy estuvo a cargo de Pitbull, junto con el estadounidense Robin Thickel, con la canción ‘El Taxi’.
La sorpresa de la presentación fue la aparición de la actriz barranquillera Sofía Vergara vestida con un traje de taxi, la ‘Toti’ acompañó al cantante cubano y bailó con él la canción.
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APPitbull, left, and Sofia Vergara perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APSofia Vergara, left, and Pitbull perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APSofia Vergara, center, and Pitbull perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APSofia Vergara, left, and Pitbull perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APSofia Vergara, left, and Pitbull perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
Matt Sayles/Matt Sayles/Invision/APSofia Vergara, left, and Pitbull perform at the 58th annual Grammy Awards on Monday, Feb. 15, 2016, in Los Angeles. (Photo by Matt Sayles/Invision/AP)
El escritor barranquillero Stefano Llinás Lamboglia presentó en el Museo de Arte Moderno (MAMB) su más reciente título, ‘La muerte del ego’, una compilación de doce cuentos que tiene como hilo conductor una intencionalidad mordaz, en el que el misterio, el romance y un par de asesinatos y fobias se encuentran presentes para descubrir culpables en un mundo de inocentes, o simples transeúntes.
No para dividirnos más, sino para tejer comunidad. No necesitamos un mesías ni una constituyente. Necesitamos ciudadanos que se pongan la camiseta con dignidad, coraje y esperanza. Porque la patria se salva con hechos, no con discursos. Tampoco se trata de buscar un salvador, sino un ciudadanía despierta, no es una figura, sino una multitud con un propósito común.
Es indispensable conseguir una mínima unidad del centro a la derecha que permita tener un candidato viable, con posibilidades reales de pasar a segunda vuelta. Hay que dejar de lado egos, vanidades, aspiraciones personales y las diferencias políticas menores.