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Dos presidentes de la República, cuatro directores de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) y tres ministros del Interior, han estado al frente de la tragedia de la gran región Mojana desde hace 1.095 días y aún no la han superado.

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El inmenso boquete que se abrió en ese dique carreteable al caer la tarde del 27 de agosto de 2021 fue de más de 2 kilómetros y desde entonces ha habido 2 contratos millonarios de obras para cerrarlo (150 mil millones de pesos) y aún persiste un tramo abierto de 60 metros aproximadamente por donde se están filtrando las aguas del río Cauca que no dejan tranquilos a los habitantes de los 11 municipios de los departamentos de Antioquia, Córdoba, Bolívar y Sucre que conforman la Mojana.

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Algunos de sus moradores, en especial en el territorio que le comprende a Sucre, han permanecido en medio de las aguas, como en La Sierpe, corregimiento de Majagual, y otro tanto decidió tomar la orilla de la vía de acceso principal a la Mojana como su sitio de alojamiento. Los cambuches de madera, plástico y fique ‘tapizan’ de lado y lado la vía. Las familias que los ocupan exponen sus vidas con accidentes de tránsito, en especial en horas de la noche.

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“De noche da más miedo porque el conductor de un carro puede no darse cuenta de los cambuches y nos atropella, y de día tenemos que estar pendientes de los niños. Nosotros mismos hicimos unos resaltos de arena para protegernos”, dice Inés Acevedo, una madre de familia que lleva más de 2 años habitando a orillas de la vía porque su casa sigue entre las aguas. “Ya no podemos vivirla porque se deterioró. Las aguas tumbaron unas paredes. Quedamos sin nada”, anota la mujer que no puede ocultar la tristeza que la embarga.

Como ella son 36 mil los habitantes de la Mojana de Sucre que están damnificados por la ola invernal de 2021 que superó, en todos los aspectos, según ellos, lo que afrontaron en la de 2010-2011.

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Además de los 2 contratos millonarios que firmaron los gobiernos de Iván Duque y Gustavo Petro para cerrar Cara ‘e gato, también se suman los aportes de 4.500 millones de pesos realizados por las anteriores gobernaciones de Sucre y Bolívar y qué decir de los aportes de la comunidad y gremios de la producción de la zona que hasta rifas de reses realizaron para captar recursos que hicieran posible el tan anhelado cierre que se logró a mediados de febrero de este 2024, pero que el lunes 6 de mayo se abrió en un tramo cercano a los 200 metros y que hoy es de 60, con la probabilidad de que se expanda si se tiene en cuenta que se está en una temporada de lluvias y las obras, en esa zona, fueron paralizadas.

Con la tragedia ocasionada hace 3 años surgieron liderazgos en la sociedad civil, entre ellos el del Pacto Social por la Mojana que ha sido el que ha liderado dos paros nacionales (vías de hecho) para hacerse sentir ante el gobierno de Gustavo Petro, pero ha sido poco lo que han logrado.

Fotos archivo EL HERALDO

Incertidumbre

Hoy entre los mojaneros lo que reina es la incertidumbre de no saber cómo y cuando es que van a terminar de cerrar Cara ‘e gato. Tras haber levantado el paro del 7 de agosto y conocer unos anuncios del gobierno del Cambio por parte del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y del director de la Ungrd, Carlos Carrillo, no ha ocurrido nada.

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“Hemos quedado peor que antes. Ahora no sabemos qué es lo que va a ocurrir. Hubo una reunión técnica y otra tuvo que ser reprogramada porque no fue el interventor y desde allí no se sabe nada. Desde el 20 de agosto no hay ningún tipo de reporte”, aseguró Rodrigo García Berrío, vocero del Pacto Social por la Mojana.

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Por su parte, Neiman Estrella Acevedo, presidente de la Corporación para la Defensa de la Mojana, Codemojana, dice que lo que hoy los embarga es la tristeza; mientras que Obman Campo Bueno, líder y veedor de SucreSucre anota que “en estos tres años lo que han evidenciado es la desesperanza y en la actualidad no ven futuro para la Mojana. El 90 % de los cultivadores ya no hace esa labor y el pequeño ganadero ya mal vendió sus reses, ahora lo que hay es hambre”.

Arruinados

Por su parte Enrique Martínez Alemán, el presidente del gremio ganadero en la Mojana en Sucre, advierte que la desatención de la ola invernal por parte de este gobierno de Gustavo Petro los llevó a la ruina.

De la zona debieron evacuar, desde hace 3 años, más de 150 mil cabezas de ganado, de las cuales 50 mil eran de ordeño, por lo que han dejado de producir 150 mil litros diarios de leche que representan unos 380 millones de pesos al día.

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Agrega el dirigente gremial que en la zona vacunaban en cada ciclo 300 mil reses y ahora no alcanzan las 150 mil.

“A la zona solo ha retornado un 5 % de esas reses porque estando Cara ‘e gato abierto no tenemos garantías para traerlas. Acá no hay garantías de nada, la gente está sumergida en la tristeza, esta zona ha quedado arruinada, como era el querer de este gobierno que es mentiroso, populista e indolente”, anota Enrique Martínez Alemán.

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Además de no saber qué va a ocurrir con Cara ‘e gato, tampoco han llegado las ayudas humanitarias con la celeridad que la situación lo amerita, y no hay plantas de las que puedan tomar al menos un fruto porque todo ha muerto. Hasta la fauna silvestre ha tenido que ser evacuada de la zona de emergencia.

Y mientras el gobierno analiza qué hacer con el contrato de $130 mil millones, de los que solo giró $25 mil millones a finales de 2023, la Contraloría abrió 3 procesos de responsabilidad fiscal y una indagación preliminar.