Tras cuatro meses y 11 días en los que los productores de yuca amarga o industrial de Sucre protagonizaran en varios puntos de la geografía del departamento unas protestas en señal de rechazo por la grave crisis financiera que los agobia, la situación sigue igual y peor en algunos aspectos.
Ante ello los cultivadores del tubérculo tienen previsto realizar un nuevo paro para hacerse sentir ante los gobiernos.
Aseguran los productores que una de las razones que los motiva a protestar es que la gobernadora Lucy García Montes no ha cumplido con el compromiso que se hizo con ellos en la protesta del pasado 13 de febrero que fue comprar 2 mil toneladas de yuca y hacer posible la condonación de las deudas de las asociaciones y de cultivadores de yuca debido a que no tienen cómo responder.
A su vez los yuqueros rechazan que la mandataria de los sucreños hubiese destinado millonarios recursos para la siembra de 800 hectáreas de yuca cuando ellos aún tienen producto y no hay quien les compre.
Dicen que el Gobierno Nacional sí les cumplió con la compra de 5 mil toneladas de yuca tanto en Córdoba como en Sucre.
Incumplimiento y abusos
Pero la situación que afrontan los yuqueros en Sucre es mucho más grave si se tienen en cuenta los incumplimientos de los contratos y los abusos que afrontan por parte de las empresas Almidones de Sucre e Ingrediom. Las dos muelen yuca, en períodos de 15 días, en la Planta de Almidones de Sucre que se sitúa a un costado de la vía Sincelejo-Corozal.
Aseguran los yuqueros que estas empresas, con las que ellos tienen firmados unos contratos, solo le hacen la asistencia técnica a los cultivos de los productores a los que ellos les hacen préstamos y les han recibido anticipos, y para el caso de Almidones de Sucre, esta además demora seis meses para pagarles le yuca que ellos les venden.
Como si esto fuera poco, al momento de hacer las pruebas de gramaje los de Ingrediom actúan como juez y parte “porque no nos permiten estar presentes en el proceso y solo salen a decir que no pasamos la prueba y entonces perdemos además de la venta de la yuca el flete del camión que nos vale 2 millones de pesos. En el último mes esta situación se ha aumentado y ya hay compañeros que agobiados por las deudas han intentado atentar contra sus vidas”.
Dice una productora que en el caso del gramaje la Gobernación de Sucre los ha dejado solos porque debe tener allí en la planta a un miembro de la Umata.
“Al cultivador independiente como yo, que está endeudado, no le cumplen con la asistencia técnica y cuando vamos a la planta hacen una muestra de densidad del almidón, pero sin la presencia nuestra ni de nadie de la gobernación”, dijo la productora de yuca amarga.
También rechazan que en la Planta de Almidones de Sucre les están sumando kilos de impurezas, es decir, yuca sucia, que no corresponde con la realidad.





















