A orillas del río Magdalena, Barranquilla se sumergió este viernes en una nueva celebración: el ‘Carnaval de Verano Río y Marֹ’. Este evento, acogido por el Gran Malecón, ofreció a la ciudad y sus visitantes una explosión de color, magia y tradición, recordando la grandeza de su emblemática fiesta magna.
Como si de una segunda temporada se tratase, la alegría y el entusiasmo regresaron con fuerza. El evento prometía ofrecer a los asistentes una experiencia única, permitiéndoles conocer de cerca la esencia de las danzas y tradiciones que han convertido al Carnaval de Barranquilla en Patrimonio de la Humanidad.
Mientras algunos disfrutaban del partido se la Selección Colombia vs Costa Rica, otros decidieron tener un contacto directo con las raíces de la región.
Para el director del Carnaval de la 44, Édgar Balnco, este intercambio de saberes permitirá una comprensión más profunda del significado y la riqueza del Carnaval de Barranquilla.
'Cada uno está en su sitio con su música, haciendo su coreografía, el contexto cultural, coreográfico, independiente como lo vivimos en Carnaval, el empujón, el borracho, van corriendo, aquí los vamos a apreciar, la gente se acerca, pregunta qué consiste la danza, de dónde son, entonces, ese es el conocimiento del Carnaval'.
Se fomenta el amor por la cultura
Muchos visitantes han expresado que este enfoque les ha permitido valorar aún más el Carnaval. Así como Lauren Salazar, quien manifestó la importancia de que se desarrollen este tipo de eventos.
'Siempre hemos disfrutado de los desfiles, pero entender de dónde vienen estas tradiciones y qué representan realmente nos hace apreciarlas mucho más'.
Mientras Lauren seguía su recorrido, Ismael Guerrero se dejó atrapar de la Danza los Coyonguitos de las Malvinas, todo un semillero que fomenta a diario el amor por la fiesta.
'Es primera vez que hacemos parte del evento y es muy especial para que el público vaya conociendo los grupos nuevos que vemos, porque prácticamente la danza Los Coyonguitos es un semillero', dijo el director de la danza, Luis Segundo Sosa.
Ismael indicó que más barranquilleros deben mostrar interés en aprender y comprender las raíces de estas danzas, valorando la oportunidad de conocer su historia y significado.
'Es importante que más allá de disfrutar del espectáculo, comprendamos la riqueza cultural que hay detrás del ritmo y el vestuario de estas danzas'.
Se enciende la tradición
El fuego de los Diablos Arlequines de Sabanalarga volvió a encender la llama de la tradición mientras los asistentes se mantenían expectantes ante el espectáculo.
La particularidad de esta tradicional danza del Carnaval es que, en cuestión de segundos, el queroseno que brota de los labios de cada diablo pasa a ser una llamarada efímera que da la impresión de que estos personajes escupen fuego por la boca.
'Me parece fenomenal porque aquí la gente tiene más tiempo para observarnos. No estamos corriendo como en los concursos, aquí podemos presentar toda nuestra coreografía con amplitud y más contacto con el público', dijo el director de la danza, Gastón Polo.
Viceministro de Cultura presenció el evento
El Carnaval de Verano no solo se convierte en una celebración, sino que también sirve como un espacio crucial para la recuperación y el fortalecimiento de la identidad cultural colombiana. Así lo expresó el Viceministro de Cultura, Jorge Zorro, quien destacó la importancia de esta iniciativa en el contexto de la riqueza y diversidad cultural del país.
'Recuperar la esencia misma de nuestra colombianidad y conocer todas estas historias de primera mano es un momento maravilloso para la recuperación de nuestra identidad', dijo en diálogo con EL HERALDO.
El Viceministro enfatizó la relevancia de que los colombianos puedan aprender y apreciar su patrimonio cultural durante todo el año, no solo en tiempos de festividad.
Por si le interesa: ¡Déiber Caicedo se queda en Junior! Fuad Char confirma compra de sus derechos
'La gente tiene que venir y apropiarse de cuáles son sus orígenes y cuáles son sus tradiciones. El Ministerio de Cultura tiene la responsabilidad de reconocer, valorar y proteger estas tradiciones, y luego divulgarlas para que formen parte integral de nuestra riqueza cultural'.
La visita del Ministerio de Cultura a Barranquilla no fue casual. El Viceministro explicó que estaban trabajando en la revisión de la Ley 397, conocida como la Ley General de Cultura, y aprovechó la ocasión para conocer de cerca las diversas manifestaciones culturales promovidas por las Secretarías de Educación y Cultura de Barranquilla.
'Estuvimos aquí con nuestro Secretario de Cultura visitando las partes más importantes y significativas de Barranquilla. Es una cosa maravillosa ver cómo las víctimas del conflicto armado están involucradas en procesos de integración y reconstrucción del tejido social'.
Un motor para la cultura
Desde la orilla del río Magdalena, el Secretario de Cultura, Juan Carlos Ospino, hizo un llamado a todos los barranquilleros y visitantes a disfrutar del Carnaval de Verano, una celebración que busca resaltar los emblemas de la cultura y las tradiciones de la región.
Al mismo tiempo en que observaba al 'Cipote Garabato', el funcionario le contó a EL HERADO la importancia de este evento.
'Son emblemas de nuestra cultura, de nuestro arte, de defensa de nuestras tradiciones y más en un lugar tan hermoso como el Malecón'.
Todos capturaron la atención del público. Con el inicio de El Congo Tigre de Galapa, Farotas de Talaigua, Diablos Arlequines de Sabanalarga, Cipote Garabato, Cumbiamba del Carajo, Paloteo, Coyongos, Goleros y el grupo de Mapalé Magendekele.
La reina del Carnaval de la 44, Natalya Ruíz Blel bailó con cada una de las danzas que le gritaron al mundo la razón por la que el Carnaval de Barranquilla es Patrimonio de la Humanidad.
