El sol fue testigo principal. La tradición y el folclor pusieron a Santo Tomás, y a todo el Atlántico, a disfrutar con la edición 46 de la Batalla de Flores.
El pulmón verde del Atlántico, que en los últimos ha sido parada imperdible para los amantes de las fiestas del dios Momo justo después de la Guacherna, volvió a vestirse de gala para recibir este magno evento.
Pasada la 1 de la tarde el momento estaba dado. El sol en su punto. Los carnavaleros en sillas, palcos y bordillos. Las comparsas y disfraces a punto de dar el puntapié inicial. Ahí, cuando todo estuvo preparado, partió y el derroche de folclor no dejó de sentirse.
Le puede interesar: Tradición, cultura y protesta social, así se vivió Carnaval del Suroccidente
El ritmo madre (la cumbia), son de negro, garabatos, marimondas y más, hicieron parte de los 26 grupos folclóricos que recorrieron las calles de Santo Tomás para demostrar el porqué de la importancia de este desfile.
De igual manera, 15 reinas municipales, entre ellas Zaida Roa de Sabanalarga, municipio que volvió a Santo Tomás después de 9 años sin ir a la Batalla de Flores y posterior Reinado Intermunicipal.
De igual manera, hubo un total de 30 tráileres que iban poniendo el ambiente festivo por las calles del recorrido, algunos acompañados de influencers; otros, con música y folclor.
Y, sin duda, algo que no puede faltar en el Carnaval son los disfraces individuales y colectivos que retratan la idiosincrasia del Caribe colombiano con sus atuendos y algunos describen la realidad del país.
En total, más de 50 de estos icónicos disfraces hicieron parte de la Batalla de Flores.
Lea además: Santo Tomás gozó con su Batalla de Flores
Canciones del Carnaval
La puja por la canción del Carnaval se trasladó hasta Santo Tomás. Allí, algunos de los artistas que buscan quedarse con este título simbólico llegaron para poner a gozar al público.
Uno de los primeros en aparecer, de hecho estuvo inaugurando el desfile junto a la reina central de Santo Tomás, fue Rafa Pérez. El artista, a ritmo del Dele que dele y su color verde característico, se apoderó del inicio de la Batalla de Flores.
Otro de los que apareció fue DJ Profeta con su ya famoso ‘¿Tú conoces a yaper?’, que fue la sensación cuando el productor apareció en uno de los tráileres para poner a cantar y a bailar a los que estaban gozando en palcos, sillas y hasta el bordillo.
También, aunque de manera simbólica, se hizo presente Mon Rivera con su mambo ‘Lluvia con nieve’, que desde el mes de diciembre lleva sonando sin parar en Barranquilla y el Atlántico.
Esta canción la hizo sonar el disfraz colectivo en Honor al Junior de Barranquilla en el que pequeños desde los 8 años imitaban a los jugadores del club rojiblanco.
El último en aparecer fue Juanda Caribe, quien con su sonada ‘La maleta’ hizo que el público la 'agarrara y se fuera'.
Los amantes de la tradición
Desde temprano miles de amantes de las fiestas del dios Momo llegaron hasta Santo Tomás para disfrutar de la Batalla de Flores.
Una de ella fue Claudia Payares, quien llegó desde el municipio de Sabanagrande para disfrutar del tradicional evento. Dijo que nunca se ha perdido una edición de esta Batalla de Flores.
'Siempre vengo con mi familia. El derroche de cultura es lo que más me gusta. He visto cómo este evento ha crecido y eso me alegra', aseguró.
De igual forma, Joaquín Charris, otro de los visitantes, comentó sentirse encantado de una vez más poder disfrutar del evento al máximo con todos los que asistieron.
En presencia de la alcaldesa
La alcaldesa de Santo Tomás, Paula Hun Badillo, le dijo a EL HERALDO que se sentía con mucha satisfacción al liderar este recorrido tradicional en su municipio. 'Feliz de poder haber tenido a todos los atlanticenses disfrutando con todas las comparsas en esta tarde maravillosa. El desfile estuvo muy organizado, me enorgullece que haya sido así', aseguró. De igual forma, el secretario de Cultura de esta población comentó: 'Santo Tomás es el escenario en el que transcurre la imaginación inagotable de los hacedores del Carnaval de los pueblos de la Costa Caribe. En sus calles, atlanticenses y habitantes de esta región exponen la magia de nuestro patrimonio'.
