Desde este domingo comienza la celebración del Día de la Madre, una fecha especial que invita a las familias a retribuir todo el esfuerzo realizado por ese ser especial que es sinónimo de vida.
No importa sus edades, tampoco el campo en el que se desempeñan, EL HERALDO escogió a seis mamás que tienen en común su amor incondicional por sus hijos y también el hecho de que desde niña tuvieron en mente ese anhelo de convertirse en seres de luz.
Ellas son madres por convicción que hoy se sienten plenas no solo por poder criar a sus retoños, sino también por realizar labores sociales que de cierta forma les ha permitido a varias convertirse en madres de otros niños, gracias a ese corazón tan noble que tienen.
Dentro de este grupo, debuta en el rol materno la presentadora de noticias barranquillera y reina del Carnaval de Barranquilla 2012, Andrea Jaramillo Char, quien habla de lo que comienza a experimentar al lado de su pequeña Cayetana, de tres meses de nacida.
También aparece la cocinera sincelejana María Emilia Fadul con su receta para ser una buena madre; la samaria Martha Cervantes, ejemplo de que a las mamás nada les queda grande y próximamente se convertirá en la primera mujer egresada del programa de Doctorado en Ciencias Biomédicas de la Universidad del Norte.
Si de superheroínas de ‘carne y hueso’ se trata, aparece Natalia Hermida, que a raíz de su experiencia como madre, ahora trabaja en pro de niños con autismo.
La poetisa Haydeé Fruto es otra de las que expande amor por el mundo a través de su obra y a los 87 años acaba de lanzar el libro ‘Dios y mis poemas’, en el que también le profesa el amor a sus seis hijos.
Por último, se realiza un homenaje póstumo a Beatriz Charris, partera tomasina que tuvo 150 ahijados por su labor, personas a las que quiso y aconsejó de la misma forma que lo hizo con sus siete hijos. A ellas y a todas las madres desde nuestra sala de redacción les deseamos un feliz día.
Andrea Jaramillo Char y su amor por Cayetana
Ser mamá primeriza es quizá uno de los mayores desafíos que enfrenta una mujer en su recorrido por la vida. La periodista y Reina del Carnaval de Barranquilla 2012, Andrea Jaramillo Char, inició esta travesía hace tres meses con el nacimiento de su hija Cayetana. Ella a sus 32 años, considera estar atravesando una de las etapas más enriquecedoras. 'Ha sido un proceso muy lindo, de mucho aprendizaje que lo reta a uno en muchos sentidos como mujer, pero son retos desde el amor'.
Jaramillo considera que este papel debe constituirse en una decisión para toda aquella mujer que deseé introducirse en el siempre complejo y amoroso mundo maternal. 'Ser madre debe ser una decisión para toda mujer. Lastimosamente no siempre ocurre por distintas problemáticas, pero siempre debe ser una bendición. Ser mamá siempre es una gran responsabilidad'.
Con ocho años presentando noticias en el Canal RCN, es consciente de que su profesión la alejará unos instantes de Cayetana, situación que a falta de un mes para la finalización de su licencia de maternidad, ha analizado con lupa y calma.
'A veces las mamás se sienten culpables por volver al trabajo y dejarlos. Intento pensar que Cayetana va a estar orgullosa de todo lo que su mamá haga. Me hace muy feliz mi carrera y seguir creciendo como profesional'.
Desde los 18 años Andrea se radicó en la capital del país para cumplir sus sueños y asegura extrañar a su natal Barranquilla. Sin embargo, en Bogotá ha experimentado el amor más puro que se impregna en una mujer cuando lleva en su vientre a un ser humano. 'Ha dormido súper bien, come a sus horas. Más allá del trasnocho. A mí lo que me daba era una angustia levantarme y mirar si estaba bien. El ser mamá te hace que te nazca el miedo. Hay que confiar en que cada día lo haremos mejor. No se trata de culparnos todo el tiempo sino de entender y abrazar el proceso'.
El amor maternal que a diario ‘cocina’ María Emilia Fadul
La comida casera constituye para muchos el alimento del amor. Esta premisa la tiene clara la cocinera María Emilia Fadul, para quien cocinar es una de las mejores opciones al momento de consentir a sus hijos. A sus 65 años es madre de seis hijos, por lo que ha multiplicado por esa cantidad los platos de comida, útiles escolares, vestimenta y lo más importante: el amor.
Sus fogones no solo cocinan sus recetas diarias, sino el amor maternal que ha entregado desde que se enteró que ejercería el gran oficio.
María Emilia también es arquitecta y diseñadora de interiores, pero sin duda, la cocina ha marcado su vida. En este mundo está involucrada desde los seis años cuando su abuela la enseñaba a realizar café árabe.
La cocinera expresó con emoción que todos sus hijos han adquirido sus saberes culinarios y entre ellos se destacan María Emilia Losada, quien es dueña del restaurante ‘Helena’ que opera en Barranquilla desde hace tres años e Ignacio Losada, creador de la repostería ‘Nacho’s Desserts’.
'Todos tienen un vínculo de pasión familiar con la buena mesa. Todos cocinan y todos tienen su pedacito de eso aunque se desempeñen en diferentes actividades', expresó.
Por más de diez años, María Emilia fue dueña del restaurante Maília, un establecimiento de la ciudad que como muchos, se vio obligado a cerrar por la pandemia. Época en la que la mujer atravesó momentos difíciles que solo fueron alivianados por sus hijos.
En su experiencia como mamá ha aprendido que no 'todo es color de rosa', pero sus hijos sí llegaron a pintar su vida de múltiples colores que ha sabido conservar en la mesa. 'Alrededor de la mesa se conserva la familia, y familia que come unida nunca será vencida', aseveró.
La sincelajana que lleva 40 años viviendo en Barranquilla, cuenta que juntos comen desde chicharrón con bollo de yuca hasta el más sofisticado de los platos. 'Ellos han sido mis mejores críticos'.
La ciencia de Martha Cervantes para ser una gran mamá
Martha Cervantes está ad portas de convertirse en la primera mujer egresada del programa de Doctorado en Ciencias Biomédicas de la Universidad del Norte. La mujer es psicóloga, tiene una maestría en genética, profesora investigadora de la Universidad Simón Bolívar y ahora persigue un reconocimiento que marcará su vida académica.
Con 41 años es madre de dos hijos que ha forjado en medio de sus funciones, lo cual representó un gran reto para ella.
'Ser madre es todo un reto. Es complejo en pleno doctorado y pandemia. El proceso de lectura y escritura de mi hija de 7 años lo viví en casa con ella, pero ha sido mi fortaleza para salir adelante', expresó.
Su gusto y pasión por la investigación la llevaron a desear el doctorado, pues lo ha relacionado con su profesión como psicóloga. En este campo busca desde trastornos biológicos hasta trastornos de la esfera mental, en donde ya ha realizado trabajos ligados al déficit de atención e hiperactividad.
'De los estudios realizado a nivel mundial surge la idea de buscar esas variables genéticas en la población barranquillera', dijo.
Con esta tesis, Cervantes espera obtener el título el próximo 27 de mayo y ser un ejemplo para sus hijos.
'El doctorado es demostrarle a ellos que sí se pueden asumir diferentes roles, solo hay que tener la voluntad y persistir'.
Cervantes es una samaria que encontró en Barranquilla el espacio idóneo para construir su familia y proyecto de vida.
Cada vez que se conmemora este día, recuerda a su madre que ya partió del mundo terrenal, pero mantiene las buenas enseñanzas que le transmitió.
'La vivencia de este día es un poco nostálgica porque ya mi mamá no está conmigo y es una sensación de nostalgia por no tenerla y a la vez contenta porque veo a mis hijos a quienes les estoy aportando una buena educación'.
Para ella, ser madre ha sido todo un reto y un regalo que agradece al despertar.
Natalia, la mamá de un niño con memoria ‘prodigiosa’
Son muchas las barreras que las personas con autismo y sus seres queridos deben atravesar a diario para que se respeten sus derechos. En el caso de Natalia Hermida, cuando la palabra autismo llegó a su vida y a la de su familia, su hijo Zaki tenía nueve meses. Los planes que venían 'marchando sobre ruedas', de pronto se desplomaron un poco.
'A los nueve meses me di cuenta de que algo no estaba bien. Me empecé a dar cuenta que se comportaba como un adulto y hacia ciertos movimientos que no eran comunes. Empezamos acompañamiento psicológico, exámenes con personas capacitadas fuera del país y a los 18 meses lo diagnosticaron', expresó Natalia.
El amor que Natalia le da a su pequeño se escribe con mayúsculas, ese que demuestra cada día su fortaleza y su amor incondicional. 'Mi hijo tiene autismo de alto funcionamiento, es un niño sub dotado. Va a cumplir cuatro años y está leyendo y también multiplica, pero se le dificulta mucho la comunicación, no de hablar sino jugar con niños de su edad, él no sabe cómo acercarse', precisó.
De igual manera, añade que 'es un niño que habla cuatro idiomas, él solo está aprendiendo japonés pero la parte social hay que trabajarla bastante, es un niño muy cariñoso. Se estresa cuando está con niños de su edad. La música lo conecta mucho', puntualiza.
Pero a pesar de todas las dificultades, también es una madre que se levanta cada día, se limpia las lágrimas y le planta la cara a las adversidades. Una mujer que siempre tiene una sonrisa y palabras de amor para reconfortarlo. Sin duda, una verdadera luchadora.
'Al principio fue duro, es primera vez que paso por una situación así, pero le di la cara y desde el día uno me dije -¿qué tengo que hacer para convertirme en una mejor mamá?-, nunca me cuestione', dijo.
Agrega que el niño 'sigue aprendiendo como le gusta. Siempre con una enorme sonrisa. Pienso en todos los ‘no’ y los imposibles que atravesamos y no puedo creer todo lo que hemos logrado'.
Los poemas con los que Haydeé celebra el Día de la Madre
Mantener la mente activa es fundamental para conservar las funciones intelectuales en la tercera edad. La lectura es un buen hábito, es una forma de proteger el bienestar mental de las personas mayores.
Haydeé Fruto, a sus 87 años, ha cumplido a cabalidad este hábito, lo cual también le dio pie para lanzar su primer libro (Dios y mis poemas), fruto de su gusto literario.
La barranquillera tiene seis hijos, ocho nietos y una bisnieta y a su edad sostiene que en la lectura ha encontrado cosas maravillosas.
Desde muy niña le encantó escribir poemas, talento heredado por su abuelo materno Bolívar Camargo. Estos poemas son la cosecha de su inspiración y el reflejo de su bondadoso y amoroso corazón.
'El libro contiene poemas inspirado en sentimientos en mis experiencias del día a día con mis hijos y nietos. Con 87 años me considero una mujer activa, quiero decir que no importa la edad que tengas siempre tienes que perseguir tus sueños'.
Leer diariamente además de ejercitar sus capacidades cognitivas hace que se disponga de un cúmulo de historias, expresiones y vocabulario nuevo.
'Desde mi niñez y juventud siempre me ha gustado escribir y leer. A mi edad comparto contenido literario en mis redes sociales. Es maravilloso para mí tener el acompañamiento de mi familia para sacar adelante este proyecto. Los sueños se logran cuando tenemos personas que lo impulsen y mis hijos han sido fundamentales', puntualizó.
Asimismo, añadió que como regalo en el Día de la Madre quiso hacer público tantos escritos que por años tenía guardado y que se enriquecían cada vez con su lectura diaria.
'Me inspiran mis sentimientos, situaciones vividas y la naturaleza. La idea de materializar el libro se dio por sugerencia de mis hijos, tenía mis poemas guardados y ellos fueron el motor para exhibirlos. Con motivo del Día de la Madre quise hacerles un homenaje a todas las que han brotado luz de su vientre', dijo.
La huella imborrable de la partera que ayudó a traer al mundo a 500 niños
La mayoría de las madres empiezan a experimentar un enamoramiento de su bebé desde que están en su vientre. Este amor se mantiene con el pasar de los años, se torna tan fuerte y grande que es capaz de superar todos los obstáculos.
Genis Charris de Pérez trajo al mundo a dos de sus hijos por medio de Beatriz Charris, una partera con más de 25 años dedicada a este oficio. Ella atendió a más de 500 mujeres en su trabajo de parto.
Para Genis, doña Beatriz representó la figura femenina con experiencia que llegó a su vida para darle calma. 'Cuando sentí las primeras contracciones se lo comuniqué a Beatriz, quien acudió a mi hogar', sostuvo.
Genis, define ser madre con ese método como 'una nueva experiencia', dice que en ese momento si existían los hospitales, pero ella al ver que vecinas y conocidas acudían donde Beatriz, también quiso hacerlo.
'Tuve a mis hijos de una manera normal. Beatriz fue una gran mujer, Hoy mis hijos están grandes y son todos unos profesionales. Hubo mucho dolor en el trabajo de parto, pero el amor por los hijos aguanta todo, eso lo aprendí de ella', aseguró.
Toda mamá es capaz de ofrecer amor a sus hijos sin importar cómo sean ellos y las condiciones por las que tengan que pasar. No hace falta que lo hijos se ganen el amor de la madre, esto es algo que se presenta de manera natural. Y mientras que aumenta el número de hijos, el amor aumentará también, para que todos puedan sentir esa seguridad que este ofrece.
Beatriz Mercedes Charris de Pertuz fue una enfermera que nació en Santo Tomás el 31 de mayo de 1.932. Cuenta su hijo, que en algunas ocasiones no les cobraba a las futuras mamás y si su esposo le daba algo ella lo aceptaba. La partera fue madrina de 150 niños que vinieron al mundo de sus manos, Beatriz fue quien les cortó el cordón umbilical y los curaba con alcohol.
Genis a sus 68 años expresa que 'para que un parto en casa cumpla con las condiciones ideales, la partera elegida debe tener el don de la sensibilidad, la empatía y la apertura suficientes para entender que cada parto y cada mujer son diferentes y eso lo tuvo Beatriz. Hoy soy una mamá agradecida y feliz', concluye.
