Aumenta donación de órganos en el Caribe colombiano

Cómo una llamada llena de esperanza, así describe Marisela De los Reyes el momento en el que le notificaron que había para ella un riñón que le mejoraría la calidad de vida.

Desde niña sufrió de una infección renal que constantemente le ocasionaba molestias para ir al baño, tanto así que en ocasiones obligaba a que sus padres salieran con ella de urgencia a cualquier centro médico para que aliviaran su dolor.

Progresivamente su enfermedad pasó de recurrente a crónica y las funciones de sus riñones comenzaron a limitarse. A los 23 años, mientras trabaja como asesora comercial y al mismo tiempo estudiaba su carrera técnica en el Sena, empezaron a aparecer los síntomas.

Vómitos, constante dolor de cabeza, retención de líquidos, hinchazón de manos y pies, entre otros, fueron algunas de las primeras complicaciones que vaticinaban para Marisela la pérdida total de sus riñones.

'Con la hemoglobina muy por debajo de lo normal y la creatinina elevada, el médico me diagnosticó insuficiencia renal crónica, por lo que inmediatamente empecé el tratamiento'.

En medio de la conversación De los Reyes confiesa que al escuchar la palabra diálisis se asustó, pero luego de informarse inició el tratamiento que la mantuvo viva durante 16 años.

Actualmente Marisela es una mujer renovada, que disfruta de la vida a plenitud y que ya cumple seis meses de haber sido trasplantada de riñón en Barranquilla.

'Estuve 16 años en la lista de espera, me tocó luchar muchísimo y pedir varios traslados de EPS, hasta el momento en el que llegó la llamada esperada. Hoy ya tengo seis meses de estar trasplantada y ha sido el regalo más grande que me ha dado Dios y la vida'.

Alexa Varela es otro caso de éxito de trasplante de riñón en Barranquilla. A los seis años fue diagnosticada con glomerulonefritis, una inflamación de los filtros del riñón.

Desde esa edad los padres de Alexa encendieron las alarmas y ante las dificultades renales que presentaba su hija, los médicos agotando todos los recursos clínicos preliminares, deciden dializarla.

Aproximadamente hasta los doce años duró en el proceso, hasta que después de una serie de exámenes protocolarios, se constató que su padre Carlos Varela, era compatible y pudo ser donante vivo de su hija.

'Ya son 16 años los que llevo de haber sido trasplantada. Recibir el órgano de un donante vivo ha sido maravilloso, el tiempo de espera se reduce muchísimo y uno lo recibe como un acto de amor, más en mi caso que fue mi papá quien fue compatible para el procedimiento'.

'El proceso quirúrgico es realmente como cualquier otra cirugía, posee sus molestias normales, pero nada de que alarmarse. De hecho, para mí es una cirugía muy gratificante porque cuando despiertas de la anestesia, sabes que has ganado una segunda oportunidad de vida'.

Paola García Padilla, presidenta de la Asociación Colombiana de Trasplante de Órganos, conversó acerca del considerable aumento de donantes que existe en la Costa Caribe. 'Aunque sabemos que el proceso de donación se ha visto afectado por diferentes contingencias, hoy en el Caribe tenemos resultados alentadores, casi en un 20 % ha aumentado la cantidad de donantes en esta zona del país'.

García también comentó sobre el proceso de donación y la importancia de la cultura del donante vivo.

'Uno de los puntos más importantes es la cultura del donante, como médicos hemos recibido muchísimos casos en los que familiares de pacientes que son compatibles se han retractado a último minuto, lo que hace que los procesos se atrasen y muchos de los pacientes nunca alcancen a ser trasplantados'.

Gustavo Aroca, medico nefrólogo de la Clínica de la Costa se refirió a la importancia del acompañamiento del cuerpo clínico dentro de estos procesos.

'En Barranquilla nos hemos robustecido en eso y el Estado actualmente brinda muchas garantías, entre ellas la cobertura de la intervención quirúrgica para trasplantes'.

Finalmente, la invitación que hacen especialistas y pacientes trasplantados a la ciudadanía es a la motivación de los donantes vivos, entendiendo que es un acto de generosidad que busca mejorar la calidad de vida de quienes lo necesitan.

Durante el XII Simposio Internacional de Nefrología y Trasplante Renal que se realizó en Barranquilla durante los días 19 y 20 de agosto, en el Hotel El Prado, expertos en el tema alertaron sobre la importancia de la prevención manteniendo hábitos saludables, la detección oportuna de enfermedades renales y la implementación de acciones para promover la donación voluntaria de órganos y el acceso equitativo a los trasplantes.

Paola García Padilla, presidenta de la Asociación Colombiana de Trasplante de Órganos, aseguró que, en el año 2020, las actividades de donación y trasplante en el país disminuyeron un poco con ocasión de la pandemia por covid-19, pero a partir del 2021 han ido aumentando, de acuerdo con los lineamientos nacionales que regulan estos procedimientos.

Según el Instituto Nacional de Salud, en Colombia durante el año 2021, se obtuvieron más de 180 donantes de órganos y 977 donantes de tejidos. Se practicaron 937 trasplantes de órganos, de los cuales 606 corresponden a riñón y el 24 % de estos casos, se realizaron con donantes vivos.

En cuanto a los pacientes en lista de espera. En Colombia hay alrededor de 3.100 pacientes en espera, y de esos aproximadamente 2.800 esperan un riñón.