
La semana empezaba con mucha alegría en la casa de la familia Algarín Peña ubicada en la vereda Soledad de Ciénaga de Oro. La proximidad de la Semana Santa llenaba de entusiasmo a María Lourden Peña de Algarín, la patrona del hogar, puesto que en pocos días recibiría la visita de familiares, a quienes ofrecería la comida y los dulces típicos de la época.
Pero todo quedó en planes por un accidente casero que jamás imaginaron que pasaría. María Lourden murió electrocutada intentando salvar a su hija Natalia Marcela, a quien vio que estaba recibiendo una descarga eléctrica cuando desconectaba el cable de un celular en la sala de la vivienda.
La tragedia pudo ser mayor porque además de Natalia Marcela y María Lourden, el jefe del hogar, Alfonso Algarín, al notar que su esposa e hija estaban recibiendo el ‘corrientazo’ quiso auxiliarlas y también se quedó pegado. El hijo mayor de la pareja logró desconectar el cargador del celular.
Al desenchufar el artefacto, padre e hija quedaron mareados mientras que la mujer adulta se desplomó y fue llevada al hospital San Francisco de Ciénaga de Oro, donde murió cinco minutos después del ingreso.
Natalia Marcela, de 15 años, resultó con quemaduras en un seno y en varios dedos de la mano derecha y del pie derecho, por lo que fue remitida al hospital Sandiego de Cereté, donde recibió atención médica. Su padre no recibió ninguna lesión física pero manifiesta que aún continúa con mareo.
Por Eduardo García