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Investigadores de la Universidad del Magdalena y un grupo de pescadores instalaron en la playa de Taganga, ubicada en el norte en la ciudad de Santa Marta, la primera jaula marina flotante para el cultivo y reproducción de peces róbalos, una especie vulnerable por su pesca excesiva y sin regulación.

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Se trata de una estructura de 10 metros cúbicos, instalada en aguas de la concesión marina que tiene la institución académica a 500 metros de la playa y en la que se podrán criar entre 60 y 70 peces.

De configuración cuadrada, la jaula fue fabricada con tubos de polietileno de alta densidad, mallas y redes para piscicultura.

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En su elaboración participaron agremiados en Apostag, una asociación de pescadores de Taganga a la que la alma máter capacitó a través del curso denominado 'Diseño, Cálculo, Construcción e Instalación de Jaula Marina'.

Lo que viene

Con el acompañamiento de los investigadores de la Planta Piloto Pesquera de Taganga, los miembros de Apostag serán los encargados de monitorear la jaula, teniendo además la misión de alimentar los peces con desechos de pescado, así como evaluar su crecimiento.

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Además de servir como criadero de peces y crustáceos, este proyecto permitirá el desarrollo de estudios sobre de la eficiencia reproductiva y aspectos nutricionales o fisiológicos del róbalo bajo condiciones ecológicamente sostenibles.

La ingeniera magister Saeko Gaitán Ibarra, docente de planta del Programa de Ingeniería Pesquera y directora del proyecto de investigación, explicó que lo que se pretende es evaluar la viabilidad reproductiva de juveniles róbalos en condiciones de cautiverio utilizando la biotecnología.

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'Esto generaría una alternativa de pesca más sostenible con el medio ambiente”, indicó.

A su turno, Harley Zúñiga Clavijo, docente del Programa de Ingeniería Pesquera y tutor del curso impartido a los pescadores, dijo que 'es un proyecto piloto y único en el país, donde trabajamos con la comunidad pesquera y damos este resultado'.

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'Es un aporte importante para la comunidad científica”, manifestó el ingeniero pesquero magister.

Los pescadores

Pedro Daniels Mattos, pescador y socio de la corporación Chinchorreros de Taganga, dijo que frente a la crisis que vive el sector, este es un proyecto que a futuro fortalecerá la industria pesquera.

“Tenemos la práctica, pero sabemos que el conocimiento teórico es importante para nosotros', comentó.

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Añadió que 'esta jaula nos va a brindar una mejor viabilidad en nuestro trabajo”.

Por su parte Wilman Mattos, un pescador que participó en el curso, indicó que 'es un aprendizaje valioso para conservar, valorar la naturaleza y apreciar nuestro sustento”.

El proyecto

Este proyecto de investigación se denomina “Implementación de sistemas productivos en la piscicultura marina del róbalo de cultivo para el fomento de su producción en el departamento del Magdalena” y es financiado por el Sistema General de Regalías, SGR.

Es apoyado por la Vicerrectoría de Investigación de Unimagdalena y ejecutado por el Grupo en Biodiversidad y Ecología Aplicada, GIBEA, adscrito a la facultad de Ingeniería de la Casa de Estudios Superiores.

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Se trata de un trabajo articulado entre biólogos, oceanógrafos, ingenieros pesqueros, acuicultores y pescadores.

El proyecto está alineado con el propósito institucional del rector Pablo Vera Salazar, de proteger los mares, transferir y apropiar el conocimiento hacia las comunidades a partir de la investigación y la innovación ambiental en beneficio de la sociedad.