Una nueva víctima entre los ciudadanos notables de La Guajira que han contribuido al desarrollo de Riohacha y La Guajira, dejó la pandemia de la Covid-19, la cual se suma a la larga lista de personalidades de diferentes áreas del quehacer local.
En esta ocasión el fallecido es el empresario del transporte Edgar Acosta Romero, un ciudadano ejemplar que a pulso propio logró posicionar varias empresas y cooperativas de transporte.
Edgar Acosta, el mismo personaje que en 2004 aspiró a ser alcalde de Riohacha y mostró en las calles tantos electores que se podía asegurar su triunfo, pero que al final fue derrotado en las urnas, empezó a mostrar quebrantos de salud hace cerca de 15 días. El profesional de la ingeniería al verse con los síntomas se hizo la prueba y dio positivo por lo cual tras unos días decidió viajar con unos familiares cercanos a Barranquilla, donde estuvo en una clínica y luego empezó a recibir atención de un médico particular en el apartamento.
Los allegados comentaron que la salud Acosta Romero empezó a empeorar al punto que fue necesaria su reclusión en una clínica de alta complejidad hasta las 11 de la noche de este miércoles cuando se produjo su deceso.
Edgar Acosta además de empresario del transporte, fue un político consagrado al que muchos líderes consultaban para tomar decisiones. En la primera década del 2.000 logró una credencial como concejal de Riohacha y también fue uno de los secretarios de obras en la capital de La Guajira. Solo le faltó ser alcalde, sueño del que había desistido.
Edgar Acosta Romero estaba casado con la dama María Idelfina Camero con la que tuvo cuatro hijas para completar sus 5 mujeres, pues antes, en su vida de universitario había tenido la primera de sus hijas.
El líder del transporte que logró constituir la única empresa con la que la compañía Cerrejón ha contratado su servicio de movilidad de los empleados desde sus municipios hasta el complejo minero, había nacido en el corregimiento Monguí, en el sur de Riohacha y sus despojos mortales regresarán de Barranquilla a la capital Guajira donde seguramente este mismo jueves la crecida familia acosta, los Romero y otros con huellas sanguíneas afines, lo conducirán hasta su última morada.