Mensaje de error

  • Warning: html_entity_decode() expects parameter 1 to be string, array given en decode_entities() (línea 463 de /var/www/html/www.elheraldo.co/includes/unicode.inc).
  • Warning: html_entity_decode() expects parameter 1 to be string, array given en decode_entities() (línea 463 de /var/www/html/www.elheraldo.co/includes/unicode.inc).
Germán CorchoErnesto Amaya, conducido por la Policía a la prisión.

Ernesto Amaya rompió ayer su silencio durante la audiencia en su contra, presidida por el Juez Séptimo Penal Municipal, después de que un fiscal le imputó homicidio agravado. La Policía lo capturó el domingo, a las 12:15 del mediodía, como principal sospechoso de matar, minutos antes, a su amante Luz Pérez Caicedo, 34 años menor que él que tiene 67.

El crimen de la mujer ocurrió en un cuarto de la residencia La Bumanguesa, calle 37 No. 33-199 del barrio San Roque.

Su relato lo empezó recordando que a La Negrita, como apodaban a Pérez, la conoció en 2008. Pero que, desde 2009, vivía sumido en el licor, despechado por su desprecio.

“Me enamoré tremendamente. Tomo todos los días, hasta dos y tres botellas”, afirmó Amaya, apodado El Cachaco por ser de Cundinamarca.

El vendedor de gafas añadió que desde el año pasado la veía más enferma. Hasta que este 4 de enero, después de hacer el amor, se lo confesó.

“Me perdona la audiencia. Yo soy un poco corto de miembro y le decía: mira, si yo soy así de pequeño y te hago botar ese poco de porquería allí, tú tienes cáncer y sida”, contó.

Amaya sostuvo que le aconsejó examinarse y, a los tres días, La Negrita lo buscó. Tenía algo que contarle. “Se fue en un mar de lágrimas, y me dice: es verdad, fui al médico y me dijo lo que usted me dijo”.

Al escucharla, El Cachaco dijo sentirse atormentado. “Ella humillándome y yo pringado también”, expresó.

“Hasta que tomé la determinación. Sí señor, me compré una navajita chiquita. Yo me dije: si no soy capaz de tirarme del Puente Pumarejo, porque tenía pensado matarme allá, entonces ahora llego, le pego una clavada en el corazón, la mato y me cuelgo. Que el cuerpo de ella me hale. Pero no me dio tiempo, porque se me cayó y abrieron la puerta”, reveló.

¿Violador?. Tras el relato, el fiscal alegó que Amaya actuó con sevicia y con total comprensión de sus actos.

“Sabía que coger un cuchillo y propinarle varias puñaladas y golpes a la señora era delito”, recalcó el delegado, quien precisó que Pérez tenía 8 heridas: en la frente, ambos senos, en la palma y dedo pulgar de su mano derecha, al lado izquierdo de su cuello y otra más en la zona izquierda de su mandíbula.

También reveló que para el presunto asesino, estar en un estrado no era nuevo. ¿La razón? En Cartagena está citado a juicio por acceso carnal violento. “Eso es mentira. Esto de ahora sí, pero ese caso es una infamia”, refutó el imputado.

Pese a su confesión, El Cachaco no aceptó ser responsable del crimen. El Juez consideró que debía ser encarcelado en la Penitenciaria de El Bosque.

Por Germán Corcho Tróchez

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
DETECTAMOS QUE TIENES UN BLOQUEADOR DE ANUNCIOS ACTIVADO
La publicidad nos ayuda a generar un contenido de alta calidad
No quiero apoyar el contenido de calidad
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.