Luego de más de 60 meses de indagaciones, los investigadores de la Dijín, en asocio con la Fiscalía, capturaron a 13 personas y judicializaron a 20 más, por el caso de Tierra Santa. Las autoridades presumen que estas personas son responsables de ingresar al país millonarios cargamentos de textiles de contrabando.
Entre los detenidos se encuentran 6 ciudadanos libaneses nacionalizados en Colombia, quienes eran integrantes de la junta directiva de un conglomerado empresarial.
A lo largo de la investigación, los agentes descubrieron que una sociedad financiera, conformada por al menos 60 empresas con nombres asociados a un conglomerado empresarial en particular, estaba constituidas solo en el papel, con el fin de facilitar multimillonarias operaciones de lavado de activos a través del contrabando de ropa y accesorios.
De otra parte y con el fin de afectar las finanzas de la red de contrabando, fiscales adscritos a la Dirección de Extinción del Derecho de Dominio impusieron medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo, secuestro y toma de posesión sobre 58 inmuebles, 20 sociedades, 65 establecimientos de comercio, 953 semovientes y 14 vehículos. El valor de los activos afectados superaría los 1,2 billones de pesos.
Los bienes están ubicados en Barranquilla, Malambo, Soledad, Galapa (Atlántico); Apartado, Caucasia (Antioquia); Magangué, Cartagena, Carmen de Bolívar, San Juan De Nepomuceno (Bolívar); Arauca (Arauca); Palmira, Buenaventura, Cali, (Valle del Cauca); Ipiales, Pasto, Tumaco (Nariño); Neiva, Pitalito, (Huila); Popayán (Cauca); Plato, Fundación, Ciénaga, Santa Marta (Magdalena); Maicao (Guajira); Montelíbano, Sahagún, Montería, Lorica (Córdoba); Valledupar y Aguachica (Cesar); Calamar (Guaviare); San Marcos (Sucre); Ocaña (Norte de Santander); Yopal (Casanare) y Floridablanca (Santander).





















