El despertar de los residentes de un sector del barrio Buena Esperanza, en el suroccidente de Barranquilla, estuvo ayer acompañado de muerte y dolor. Yeryeli Yanet Mofi Silva, de 41 años, oriunda de Venezuela, y vecina del lugar, murió al ser alcanzada por una bala perdida disparada por la delincuencia que azota la ciudad.
Los hechos que desencadenaron este homicidio iniciaron a las 5:45 de la mañana de ayer en la calle 60 con carrera 14, barrio La Ceiba.
Allí dos sujetos que se desplazaban en una motocicleta Boxer de color negro, intentaron atracar a un transeúnte que al parecer se dirigía a su trabajo.
Este se percató de la intención de los dos delincuentes y salió corriendo hacia la carrera 18 para ponerse a salvo.
Los bandidos al ver que su objetivo se les escapaba le dispararon, pero las balas en su trayectoria alcanzaron fue a Yeryeli Yanet Mofi Silva.
La mujer recibió un balazo en el abdomen que le arrebató la vida.
Al momento del incidente la extranjera salía de su casa para entregar a su hijo al transporte escolar.
El menor presenció cuando su madre caía herida.
Rápidamente Yeryeli fue trasladada por familiares y vecinos al Hospital Nazaret, donde según el personal médico ingresó ya sin signos vitales.
Las autoridades investigan el caso para dar con la localización y la captura de los responsables.
Ya van cuatro
En lo que va corrido del año en el Departamento han muerto cuatro personas alcanzadas por balas perdidas.
El 9 de enero en el municipio de Luruaco, Jeison Vásquez Pérez, un joven de apenas 17 años, murió en medio de un confuso incidente.
Una asonada provocada por el asesinato de un hombre a manos de la banda ‘Los Culebros’ revolucionó a los habitantes de la población, al punto de generarse una asonada.
Jeison, conocido como el ‘Pirro’, cantaba champeta pero su sueño se vio truncado por una bala perdida en medio de la revuelta.
El 18 del mismo mes, en el barrio La Chinita, una mujer de 78 años fue la segunda víctima.
Cenith Hereira Fontalvo iba camino a su residencia en la carrera 12 No. 11-09, después de visitar a sus hijas unas calles antes, cuando de repente se desató un tiroteo entre miembros de la banda delincuencial ‘Los ‘Papalópez’, según informó la Policía en su momento.
Cenith intentó refugiarse en una casa, pero sus piernas cansadas no le respondieron y una de las balas disparadas en la refriega entre delincuentes la alcanzó y le causó la muerte en la terraza de la vivienda.
También por una bala perdida el 18 de febrero una adolescente de 14 años murió blanco de uno de estos proyectiles. El episodio ocurrió en la calle 52 con carrera 3C, barrio Las Américas.
Según la investigación de la Policía, entre la madre de la menor y un sujeto apodado Flaqui se originó una discusión en la terraza de la vivienda. El individuo, según la mujer, disparó un arma y 'sin querer' mató accidentalmente a la jovencita.
