'Adidas no tolera el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio', señaló en un comunicado la empresa, cuando en octubre de 2022, anunció que ponía fin a su relación comercial con el rapero Kanye West, también conocido con el nombre de Ye.
El rapero y Adidas trabajaban juntos bajo la marca Yeezy, pero la empresa tomó la decisión de romper su colaboración con el rapero debido a sus publicaciones antisemitas y cargadas de odio en las redes sociales, por las que incluso, fue suspendido de varias plataformas digitales.
La colaboración entre Adidas y el cantante inició en el 2014, siendo, durante muchos años, una de las más fructíferas del mundo y representaba hasta el 15% de sus ingresos netos, por lo que haber puesto fin a esta le ocasionó 600 millones de euros en pérdidas de ventas en los últimos tres meses de 2022.
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Uno de los grandes dilemas que enfrenta la empresa alemana de equipamiento deportivo tras meses de haber cortado vínculos labores con Ye, es que no saben cómo deshacerse de 1.300 millones de dólares en zapatos de la marca Yezzy.
El director ejecutivo Bjorn Gulden le comentó a medios estadounidenses que vender la popular línea de zapatos significaría que tendrían que pagarle regalías al cantante. Sin embargo, tampoco considera destruirlos, pues resaltó que esto podría 'plantear problemas de sustentabilidad'.
Asimismo, reveló que les han sugerido que los regalen en lugares como Siria o Turquía, pero esto significaría que el producto 'volvería muy rápido' debido a su alto valor en el mercado y por eso han rechazado también esta opción.
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Por esta razón, la compañía prevé una pérdida operativa para este año de 700 millones de euros. Sin embargo, el CEO de la empresa llamó al 2023 'un año de transición' y dijo que 'entonces podemos comenzar a construir un negocio rentable nuevamente en 2024'.
Gulden trambién dijo que 'muchas empresas' estaban dispuestas a comprar las populares zapatillas, pero aseguró que los rumores de que la empresa estaba en conversaciones para venderlas 'no son ciertos'.
