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Más de 30 horas secuestrado, sin sus pertenencias, sin comunicaciones con familiares o allegados y con un compañero asesinado. Todo eso sufrieron los policías en la verada Los Pozos, de San Vicente del Caguán, en Caquetá.

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De la situación, que empezó con manifestaciones en contra de la empresa petrolera Emerald Energy y que terminó con enfrentamientos entre policías y campesinos, dejando a un policía y un civil asesinados, además de las investigaciones, quedan los testimonios.

El intendente Juan Ávila, uno de los policías involucrados, en entrevista con RCN describió lo que vivió junto a sus compañeros durante la crisis que se presentó.

'Fueron momentos tensos… No teníamos comunicación de ningún tipo, con ninguna persona salvo entre nosotros mismos, fueron momentos de angustia. También reconocer la capacidad y estabilidad mental de todos mis compañeros sin importar lo que nos dijeran, sin importar las amenazas de vida, las amenazas de cual siempre se guardó la compostura, la calma, se trató de mediar de hablar con estas personas, somos una unidad que siempre tiene como premisa la vida… Esa fe tal vez nuestra consigna, nuestro fin principal', dijo Ávila.

Añadió que fue uno de los que estuvo pendiente de su compañero, el subintendente Ricardo Monroy, quien resultó muerto, pero que la arremetida de los protestantes influyó en no poder hacer más para salvarle la vida.

'Le estábamos protegiendo la vida, pero no fue posible por la magnitud de la confrontación de estas personas, las cuales llegaron con machetes, con gasolina y bombas incendiarias. Escuchábamos también detonaciones alrededor nuestro y la fuerza con la que ellos obviamente arremeten contra nosotros ya lo habían lesionado gravemente, el enfermero lamentablemente no lo puso estabilizar', mencionó.

{"titulo":"Prada dijo que lo del Caquetá 'no fue secuestro sino cerco humanitario'","enlace":"https://www.elheraldo.co/colombia/ministro-de-interior-alfonso-prada-dice-que-lo-ocurrido-en-caqueta-no-fue-secuestro-sino"}

Ávila, en la entrevista, también aclaró que, aunque había personas 'con claras intenciones de afectar la vida de los miembros de la seguridad pública', también había varios que abogaban por ellos y los ayudaron con comida y medicina.

'… No sabíamos que iban a hacer con nosotros, se escuchaba de todo, obviamente intensiones de afectar la vida de todos los que estábamos allí. Pero también había personas que eran conscientes y defendían nuestra condición de seres humanos, abogaban por esto y en primera mano nos prestaron algún tipo de ayuda con alimentos, con medicinas', aseveró.

El intendente, además de agradecer a las personas que le han mostrado apoyo a la institución y todos los involucrados, aseguró que seguirá con su labor en la Policía Nacional y afirmó que se siente orgulloso de todos sus compañeros por el gran esfuerzo.

Asimismo, reconoció que tanto él como los demás uniformados luego de ser liberados han recibido toda la atención posible por parte de la Policía y otras autoridades gubernamentales.