Compartir:

Distintos estudios y análisis de expertos han alertado sobre los problemas en la vida diaria y en la salud que pueden traer el uso excesivo del teléfono celular. Un joven japonés es el mayor ejemplo de la realidad del tema, pues desarrolló el “síndrome de la cabeza caída” tras pasar años utilizando su dispositivo con la cabeza inclinada hacia abajo.

Leer también: ¿Por qué se duerme menos cuando más años se tiene? Esto explicó un experto

El caso fue difundido por la revista JOS Case Reports, publicando el informe para ayudar a alertar sobre esta práctica del uso prolongado de dispositivos móviles.

De acuerdo al relato, se trata de un joven que abandonó sus estudios por acoso escolar y problemas de salud mental. Por esto, pasó varios años aislado, con una rutina centrada en el uso del teléfono celular.

Por esta práctica, mantenía el cuello flexionado por horas, en la misma posición, lo que lo llevó a sufrir una cifosis cervical severa, que no es más que una curvatura anormal de la columna en el cuello.

Por supuesto que la deformación le causó un dolor crónico, pero además empezó a sentir debilidad en las manos, entumecimiento en los brazos y dificultad para tragar.

El joven acudió al médico ya cuando la postura era irreversible. Ya su cabeza se mantenía con el mentón pegado al pecho, sin poderla levantar. En un centro de salud, luego de unos exámenes, se pudo notar una curvatura de 108° entre las vértebras C3 y C6, un grado extremo de cifosis. Además, presentaba una mielopatía cervical, un daño en la médula espinal provocado por la compresión de las vértebras.

Importante: Asocian el consumo de alimentos ultraprocesados a un mayor riesgo de cáncer de pulmón

Fue entonces diagnosticado con el “síndrome de la cabeza caída”, que es una condición caracterizada por la incapacidad de mantener la cabeza erguida debido a la debilidad de los músculos extensores del cuello.

Este diagnóstico va agregado a que presentaba signos de daño neurológico, una médula espinal aplanada y comprimida, con tejido cicatricial que afectaba los reflejos, la fuerza muscular y la coordinación. Solo podía alimentarse una vez, debido a la disfagia (dificultad para tragar).