Barranquilla

Suroccidente, una localidad que sigue “transformándose”

Ciudadanos y líderes comunitarios hacen una radiografía de la actualidad de sus barrios. Conozca las tareas pendientes en la localidad más grande de la ciudad.

Con una maleta llena de sueños e ilusiones, Francisca Tapia salió de su natural Majagual (Sucre) a “probar suerte” en la capital del Atlántico. Fue en Las Malvinas donde esta mujer echó sus raíces, sumándose al grupo de vecinos que con esfuerzo y tesón trabajaban por cambiarle la cara a este incipiente sector. 

Más de 30 años han transcurrido desde ese momento y para ella el presente no puede ser mejor en este icónico barrio del Suroccidente.

“Cuando yo llegué acá, el barrio tenía muchas falencias. Esto era puro monte y tan solo unas cuantas casitas. Con la ayuda de Dios, las cosas han ido mejorando poco a poco”, dice con espontaneidad la mujer mientras saluda a uno de sus “entrañables” vecinos.  

En su memoria se encuentran intactos los recuerdos de los “momentos de angustia” que vivían a causa del barro y el polvo que “inundaban” las distintas calles del barrio.

Los distintos parques del Suroccidente han vuelto a llenarse de niños. Jeisson Gutiérrez

“Sufrimos bastante por el estado de las calles. Había mucho barro y las casas siempre estaban sucias por la contaminación. Ahora todo es distinto y podemos coger un bus con facilidad, algo que no podíamos hacer antes”, resalta Francisca al tiempo que “vigila” el avance de la pavimentación de una de las pocas calles que sigue destapadas en el sector.

A pocas cuadras de ese lugar, más exactamente en el barrio Kalamary, Marlene Gamarra también rememora el proceso de transformación que ha tenido este sector. No por menos, de acuerdo con las proyecciones del Distrito, en la localidad más grande de toda la ciudad se han pavimentado cerca de 225.935 metros de vías, que corresponden a 1.128 tramos viales.

En su concepto, la intervención de vías ha permitido cambiarle la cara a barrios que por años estuvieron sumidos en el olvido, así como brindarles una mejor calidad de vida.

“Cuando yo llegué acá, era puro barro. Para salir hasta la 27 teníamos que caminar con bolsas para que no se nos ensuciaran los zapatos. Vivíamos como personas incivilizadas”, recuerda la mujer, quien durante años ha sido una “aguerrida” defensora de su barrio, al punto de ser elegida recientemente como presidenta de la Junta de Acción Comunal.

El Suroccidente cuenta con varios Pasos y Caminos. Jeisson Gutiérrez
Otras obras en la localidad

Para la comunidad del Suroccidente, la “transformación” de la localidad ha seguido una hoja de ruta “sólida” que ha saldado “deudas históricas” de las autoridades. Sin embargo, también creen que este proceso se puede acelerar y así posibilitar la realización de otras obras que tendrán un “impacto positivo” en las cientos de familias que viven en la zona.

Jair Fals, habitante del barrio La Pradera, destacó que en el sector se ha venido adelantando un proceso de modernización de la infraestructura educativa, con el fin de redundar en beneficios para los estudiantes y toda la comunidad académica.

“Estamos muy satisfechos con el progreso que ha tenido la localidad. La educación es muy importante y en la zona hemos pasado de tener colegios en mal estado a una infraestructura de calidad, permitiendo que nuestros hijos tengan una mejor formación”, asegura Fals.

En su concepto, otro de los “puntos positivos” es la transformación de parques y otros escenarios, que permiten contar con espacios para la recreación y el disfrute familiar.

“Por muchos años hemos peleado por tener mejores parques y poco a poco hemos empezado a tener respuestas a esas peticiones”, dice el hombre mientras camina por una de las calles de su barrio.

Es importante destacar que La Pradera, La Paz, San Felipe y El Edén serán algunos de los barrios de esta localidad que, en lo corrido del año, estrenarán espacios de recreación totalmente renovados.

Para Paula Sanjuan, edil del Suroccidente y habitante del barrio Las Malvinas, se debe destacar que la población en condición de discapacidad ha empezado a tener un lugar dentro de los programas y proyectos que se han puesto en marcha en la localidad.

Además, resalta que los habitantes del Suroccidente ahora cuentan con la posibilidad de acceder a servicios de salud a través de Pasos y Caminos, los cuales han sido habilitados en sectores estratégicos para “impactar a toda la comunidad”.

“La transformación que ha vivido el Suroccidente ha sido un proceso lento, pero nos llena de mucha satisfacción”, agrega.

Adolfo Mojica, presidente de la Junta de Acción Comunal de El Edén, sostiene que la canalización del arroyo Salao II ha sido una “solución a medias”, puesto que hay tramos que no han sido intervenidos.

“Es una obra muy importante y esperamos que muy pronto se inicie la construcción del parque lineal, que será un espacio para el disfrute de todos en el barrio”, expone.

Los niños y jóvenes del barrio La Paz comparten con arte y cultura en la plaza Paloquemao. Samuel Buelvas

Una apreciación similar hizo José Caballero, quien no ocultó su inconformismo debido a los “malos ratos” que debe vivir por culpa del mismo arroyo.

“Tenemos muchos años a la espera de una solución definitiva. Los malos olores reinan por la zona y nos tienen encerrados en nuestras casas”, dice.

Para la comunidad del Suroccidente, la ampliación de la avenida Circunvalar es otro proyecto “neurálgico” que se debe acelerar, con el fin de reducir los traumatismos en la movilidad.

Con ese y otros proyectos, el Suroccidente quiere seguir por la senda del desarrollo y consolidarse como punta de faro de la transformación de la ciudad.

Las problemáticas que aquejan a sus habitantes
En Kalamary, la comunidad exige mejores escenarios deportivos. Jeisson Gutiérrez

Para la comunidad del Suroccidente de Barranquilla no todo es “color de rosa”. Inseguridad, altos valores de los servicios y falta de escenarios deportivos son algunas de las problemáticas que los aquejan.

Habitantes del barrio Las Estrellas aseguraron que la instalación del Centro Transitorio se ha convertido en una “latente preocupación”, en especial por las recientes fugas de los internos.

“El Centro Transitorio ha traído más inseguridad y zozobra. No podemos descansar en paz, sumado a que nuestras casas se han empezado a desvalorar”, dijo un residente de la zona.

Con relación a la prestación de servicios públicos, los habitantes indicaron que el principal inconformismo corresponde, en gran medida, por las altas tarifas.

“Seguimos en la lucha con la empresa Air-e. Se necesitan muchas inversiones en las redes, porque la luz se va de un momento a otro y afecta a muchos negocios, sin contar los altos valores de la facturación cuando no superamos el estrato dos”, dice Adolfo Mojica, líder de El Edén.

Otra de las preocupaciones es la falta de espacios “dignos” para la práctica de deportes en algunos barrios de la localidad.

Carlos Barraza, habitante del barrio Kalamary, sostiene que “en este sector los niños no tienen donde practicar deportes. El único sitio es el polideportivo El Edén, que está cerca, pero pueden arriesgar su vida caminando hasta ese lugar”. 

Por otro lado, los habitantes también lamentan que no cuentan con una Alcaldía local, que les permita tener acceso a la oferta de la administración distrital: “Muchas veces no tenemos los recursos para ir hasta el Centro para hacer esas diligencias”.

Sitios de interés en la localidad Suroccidente

En los 65 barrios que conforman la localidad Suroccidente se encuentran un sinnúmero de sitios de interés. 

Uno de ellos es el Parque Bicentenario, ubicado en el barrio La Paz. Cuenta con 20 mil metros cuadrados y se ha convertido en un espacio para la integración de la familia, destacándose las zonas de recreación para los niños. 

Actualmente se avanza en la ampliación de este espacio. El proyecto ha sido construido de forma conjunta con la comunidad, respondiendo a sus distintas solicitudes y peticiones.

En este mismo barrio se encuentra ubicada la Biblioteca Popular, un espacio que abrió sus puertas en la década de los 80 como un proyecto comunitario para fomentar la lectura y la escritura. A pocos pasos se instaló recientemente el monumento al Trabajo Comunitario y Solidario.

Asimismo, en esta localidad se encuentran ubicados el Centro Comercial Americano y el Éxito San Francisco, entre otros reconocidos establecimientos comerciales.

Además, varios templos religiosos están dentro de la jurisdicción de esta localidad. Las parroquias San Felipe Apóstol, San Francisco de Asís y Nuestra Señora de la Candelaria, entre otras.

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