En medio del proceso de renegociación de contratos que se puso en marcha para reducir las tarifas de energía en el Caribe, la empresa Air-e dio a conocer que ha recibido respuestas oficiales de 7 de los 23 agentes que suministran energía.
Jussy Faroy Zelaya, director de Negocio de la empresa Air-e, aseguró que tras la cumbre energética realizada recientemente en Barranquilla se iniciaron las gestiones con las empresas generadores con las cuales se han suscrito contratos para la compra de energía.
“Les enviamos cartas y les solicitamos una reducción del 22 %, que sale de mantener el Índice de Precios al Productor (IPP) histórico y no afectar los precios de la energía por los IPP atípicos entre los años 2020 y 2022”, dijo.
Recalcó que, en el transcurso de la semana, se espera tener la respuesta de los otros generadores: “Sabemos que el plazo de la reunión finalizó el pasado viernes, pero tenemos esperanza porque sabemos que hay generadores que están teniendo reuniones para evaluar el tema”.
Expuso que tras este proceso se deberán realizar reuniones con los generadores que se acojan a la renegociación de los contratos. En dichos espacios deberán participar el Ministerio de Minas, la Superintendencia de Servicios Públicos y la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg).
“Se va a definir cómo se van a enfocar los descuentos que se consigan, se va a determinar a qué usuarios se va a focalizar. Esperemos que sea para los usuarios más pobres del Caribe, y así acercarnos a lo que sería por primera vez una tarifa justa para estos usuarios”, recalcó.
Oferta de energía
Por otro lado, la empresa Air-e precisó –a través de un comunicado de prensa– que los generadores tan solo ofertaron 3% de la energía que se necesitaba comprar, vía convocatorias entre 2022 y 2023, para cubrir al mercado de Atlántico, Magdalena y La Guajira.
“La realidad es que no han querido vender energía a este mercado obligándolo a ir a bolsa la cual, por ejemplo, ha subido 450 % en las últimas semanas. Esta volatilidad ha perjudicado financieramente a los usuarios”, agregó.
Indicó, además, que el reconocimiento de las pérdidas de energía beneficia, en primera medida, a los generadores de energía: “Más del 90% de lo que se recauda por pérdidas son ingresos para los generadores y transmisores y no para Air-e”.
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Con relación a la opción tarifaria, la compañía indicó que representa dinero que se pagó por años a toda la cadena –conformada por componentes como generación, transmisión y restricciones–, pero que no trasladó a los usuarios para financiarlos.
“Es un monto que alcanzó a superar 1 billón de pesos. Por lo tanto, la generación y otros componentes de la tarifa, que no son responsabilidad directa de Air-e, están incluidos en la opción tarifaria”, enfatizó.
Asimismo, la empresa expuso que es bienvenido el diálogo académico, teniendo en cuenta que “están en juego 10 millones de colombianos que por fin gozan de un servicio de energía de calidad pero aún esperan precios justos”.
La compañía también hizo un llamado a que “mantengamos este debate en el terreno de las ideas, como se ha venido planteando, y no escalarlo a otros planos. Enfoquémonos en encontrar soluciones reales para los usuarios”.
Voces de expertos
Amylkar Acosta, exministro de Minas y Energía, sostuvo que el resultado de la renegociación de los contratos entre generadores y distribuidores de energía no va a impactar las tarifas.
“Hasta ahora solo dos generadores han ofrecido una reducción del precio en un 10 %, toda vez que el cargo por generación, que es solo uno de seis componentes y representa el 35 %; en consecuencia significará una baja del 3.5 % en la tarifa y eso siempre y cuando los demás generadores se sumen a la iniciativa”, dijo.
En ese sentido, puso de presente que entre enero de 2023 y enero de 2024 se registró un incremento del 31 % en las tarifas de energía.
Expuso que, de esta manera, se “repite la historia” del pacto auspiciado por la exministra Irene Vélez, el cual se tradujo “en una baja de la tarifa del 2.8 %, cuando el alza había sido superior al 40 %”.
“Cabe decir que entre la deuda por la opción tarifaria y las pérdidas reconocidas pesan en la fórmula tarifaria el 30 %”, enfatizó.
Norman Alarcón, coordinador en el Caribe de la Liga Nacional de Usuarios de Servicios Públicos, calificó como “pañitos de agua tibia” el proceso de renegociación de contratos entre las generadoras y las empresas Air-e y Afinia.
“Una reducción del 10 % en la generación corresponde a cerca de 37 pesos, teniendo en cuenta que por cada kilovatio/hora se pagan 371 pesos por dicho componente. Es decir, ante el precio total del kilovatio sería del 3.3 %”, explicó.
El líder de los usuarios sostuvo que dicho alivio beneficiará a las zonas especiales, que corresponden a los barrios subnormales y zonas de difícil gestión: “Es decir, no es para todos los usuarios. Nuevamente pañitos de agua tibia para la región Caribe en el problema tarifario”.
Mientras que el abogado Ricardo Núñez, miembro del Comité Atlántico de Servicios Públicos, aseguró que las medidas anunciadas por las generadoras resultan insuficientes, teniendo en cuenta que “representan solamente el 30 % del precio del kilovatio y una reducción del 10 $ en ese componente es muy mínimo”.
Cuestionó la falta de voluntad por parte de mandatarios comunes de reducir los cobros adicionales en la factura de energía, que corresponden a cerca del 30 % del total mensual.
