
Sentido adiós a los niños fallecidos en incendio en San Onofre
El alcalde Jesús Julio Teherán lideró los homenajes y también asumió, desde la administración, los gastos funerarios.
El pueblo sanonofrino se volcó al inicio de la tarde de este martes a la plaza pública a rendirle un homenaje a los 4 niños, entre ellos un recién nacido, que fallecieron la noche del 10 de enero en un incendio de la casa que habitaban en El Bajito, vereda del corregimiento Plan Parejo.
Posterior al homenaje que realizaron en la Cancha de La Pola hubo una eucaristía y luego las exequias.
Los cadáveres de María del Carmen Martínez Berrío, de 13 años; de su hijo Samuel Berrío, de 4 meses y de los hermanitos Vanessa y Jesús David, de 12 y 11 años, respectivamente, fueron reclamados a las 11:00 de la mañana en la sede de Medicina Legal, en Sincelejo.
La demora en las exequias de los niños, que se produjo casi dos meses después de haber fallecido calcinados, se debe a que sus cadáveres quedaron juntos y Medicina Legal debía realizar todos los trámites necesarios, entre ellos los genéticos, para así entregar los restos por separado y que tuvieran cristiana sepultura.
María Cristina Berrío Chiquillo, madre de María del Carmen, abuela de Samuel y tía de Vanessa y Jesús David, fue la encargada de reclamar los restos de los niños en Sincelejo y en pidió a las autoridades que no cesen en las investigaciones que permitan establecer qué fue lo que realmente ocurrió.
“Mi mamá y yo creemos que ese incendio fue provocado, además el niño de 8 años que se salvó dice que llegaron unos hombres y eso es lo que queremos que se establezca porque los niños ya eran grandes la mayoría y no nos explicamos cómo no salieron de la casa al ver esas llamas”, anota la mujer.
La primera de las hipótesis que se teje sobre este incendio que empezó por la noche y que se extendió hasta la madrugada por no haber agua suficiente para sofocar las llamas, es que pudo haber sido provocado por un fogón de leña en el que habían preparado los alimentos horas antes.
La vereda en la que ocurrió esta tragedia, en casa de los abuelos maternos de los niños, se sitúa a 40 kilómetros de la zona urbana de San Onofre.