Día internacional de las víctimas de desaparición forzada, conversatorio en Sucre con la JEP

Fanny De la Rosa, al igual que sus hermanas Carmen y María y su prima Betty completan 25 años de búsqueda de dos hermanos y un primo que salieron del barrio El Bosque, en Sincelejo, hacia Apartadó (Antioquia) a vender los arequipes que ellos mismos fabricaban.

Estas mujeres, miembros fundadoras de la Red de Tejedoras de la Memoria, aseguran que ha sido una búsqueda dolorosa, pero en la que no cesan, y ahora con más optimismo porque a través de la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) se enteraron de que existe la probabilidad de que los restos de sus tres seres queridos estén en la misma zona donde desaparecieron, es decir, zona rural de Antioquia.

'Hay posibilidades de que los encontremos y eso es motivo de alegría, aunque también sigue siendo doloroso. La información de la comunidad en el proceso nos va a ayudar a encontrar a mis hermanos Ricardo y Néstor y a mi primo Edgardo', dice Fanny en medio de un llanto que la ha acompañado en los últimos 25 años de su vida.

Al igual que ellas hay otras víctimas de la desaparición forzada que no cesan en su objetivo de darle cristiana sepultura a sus seres queridos. Una de estas es Mirelis del Rosario Cuello que tiene las esperanzas de encontrar prontamente los restos de su esposo Julio José Sequea Bravo desaparecido hace 20 años de una finca en Chengue, Ovejas. Su esposo tenía 29 años. Ella asegura que los aportantes de verdad están suministrando información y con base en ella están realizando búsquedas de más fosas.

En las mismas condiciones está Blanca Bella Velásquez, una mujer adulta nativa de Sincelejo que busca a sus hijos Nancy y Raúl Herrera Velásquez. El hombre desapareció en el año 2001 cuando iba hacia el Magdalena, y la mujer desde 2007.

Roumalda Paternina, la presidente de la Red de Mujeres Tejedoras de la Memoria, no solo carga con el dolor de la desaparición de su hijo sino también con el de sus amigas e integrantes de esta agremiación que nació para visibilizar este flagelo, por eso los 5 de cada mes realizan plantones en el Parque Santander, en el Centro de Sincelejo.

Esta líder destaca los avances que se han dado en el marco de la búsqueda de desaparecidos, así como en el reconocimiento y entrega de restos hallados en fosas, pero anota que no son los que ellos como víctimas esperaban, por eso pide celeridad.

También llama a las autoridades al reconocimiento y apoyo de las víctimas a las que este delito les cambió el rumbo de sus vidas.

Se queja y denuncia que teniendo un lote (predio) que fue donado por la Alcaldía de Sincelejo en el mandato de Jairo Fernández Quessep ninguna autoridad local, departamental y nacional se ha preocupado por hacer realidad la construcción del Parque de la Memoria.

'Si tuviéramos ese parque no tendríamos por qué tener nuestra galería de víctimas expuesta en el suelo sino que estos eventos conmemorativos fueran en ese sitio, un lugar digno para todos. También necesitamos más efectividad en los avances', anotó Roumalda Paternina.

Por su parte la magistrada de la JEP que atiende el caso de desaparición forzada, Reinere Jaramillo Chaverra, y que ayer acompañó a las víctimas en el conversatorio denominado ‘En la búsqueda nos encontramos’, que se realizó en Sincelejo, destacó que con eventos como este se dignifica a las víctimas.

Recordó que en Sucre, en especial en el municipio de San Onofre, hay unas medidas cautelares de protección de cementerios y fincas en aras de preservar y garantizar la búsqueda de desaparecidos, además las administraciones de Sucre y San Onofre trabajan en la parte jurídica de un predio donde será levantado un monumento que es otra de las medidas restaurativas adoptadas por la JEP en este proceso.

Ella Del Castillo, directora de la UBPD para Sucre y Bolívar, asegura que el número de desaparecidos para el primer departamento se acerca a las mil. En la actualidad tienen en marcha tres planes regionales de búsqueda. Uno de ellos es el de Golfo de Morrosquillo y Montes de María que tiene identificado un universo de 1.734 personas desaparecidas en 17 municipios, y en el de la Mojana y San Jorge hay más de 700 personas.