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La campaña para escoger a los representantes de las víctimas en el Congreso de la República en las elecciones de este 13 de marzo, lejos de ser un proceso de reivindicación a los derechos de estas comunidades, se ha convertido en una revictimización.

A un mes de ir a las urnas, los candidatos, que para el caso de la subregión Montes de María que comparten los departamentos de Sucre y Bolívar, hay 20 listas inscritas, es decir 40 aspirantes, un titular y un suplente, no han recibido los recursos por parte del Gobierno Nacional para hacer su campaña.

{"titulo":"En Sucre trabajan para evitar el reclutamiento de menores","enlace":"https://www.elheraldo.co/sucre/en-sucre-trabajan-para-evitar-el-reclutamiento-de-menores-887314"}

Los pocos recursos con los que estas víctimas cuentan los han utilizado en transporte para llegar a las zonas más apartadas de los Montes de María a explicarles a sus pobladores --otras víctimas de la violencia-- que este 13 de marzo tienen la opción de contar con un representante como ellos en el Congreso de la República.

No les llevan dádivas y menos falsas promesas, sino realidades, haciéndoles saber que es una campaña de pobres.

Además de lidiar con este asunto de índole económico, tanto los candidatos como los habitantes de Montes de María, afrontan el recrudecimiento del conflicto armado con nuevos actores. Ya no hay Farc ni Auc, pero sí Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) o Clan del Golfo, que al igual que las dos primeras son peligrosas.

{"titulo":"Destacan avances de la política de paz con legalidad en Sucre","enlace":"https://www.elheraldo.co/sucre/en-el-departamento-de-sucre-destacan-avances-en-proyectos-de-politica-de-paz-887088"}

Los tienen sometidos, no los dejan salir en las noches, les controlan sus movimientos y como si fuera poco asesinan a las personas para sembrar terror. Los líderes del territorio lo han denunciado, la mesa Sucreña por la Paz y la Mesa de Garantías también, pero las autoridades a pesar de las situaciones visibles no le dan toda la credibilidad a la situación, o por lo menos esa es la percepción que la comunidad tiene de eso.

En el más reciente Segundo Diálogo Social de Seguridad y Paz Territorial de los Montes de María la sociedad civil reiteró la difícil situación de orden público que afrontan en estos momentos y que afectaría el libre ejercicio democrático que se avecina.

Le solicitaron a la Defensoría del Pueblo emitir una alerta temprana para esta zona, donde hace 11 meses salió una de inminencia ante los hechos registrados en una vía donde un ciudadano perdió la vida al ser impactado por unos balazos que pegaron en la camioneta que fue emboscada a las 11:00 de la noche: 'habría violado la orden de no salir a la calle después de 7:00 de la noche'.

La Misión de Observación Electoral (MOE) presentó el mapa de riesgo de estas elecciones y en él Sucre tiene municipios con riesgo por inseguridad y fraude electoral. Esto lo ratifica José Fredy Aguilera, el coordinador de la MOE en Sucre y quien lideró el jueves la firma del Pacto por la Unidad, la Paz, la Transparencia y el Territorio entre los aspirantes a las curules de paz en Montes de María.

Ese escenario que contó también con la presencia de representantes de organizaciones internacionales sirvió para que los candidatos expusieran las situaciones que afrontan en materia de seguridad. Los han amenazado y han tenido que salir del territorio, es decir, el voto a voto buscado en las casas de las veredas y corregimientos se les hace cada vez más esquivo.

Carlos José Díaz Hernández, uno de los aspirantes a esa curul especial de paz por Montes de María a través de la comunidad Zenú de Galapa, en Ovejas, denunció que por amenazas tuvo que abandonar en la última semana el corregimiento San Rafael, población donde este 13 de marzo habrá una mesa de votación.

Asegura que la situación en la zona es compleja, reina la incertidumbre porque las garantías que debía dar el Estado para cada candidato no se están teniendo y las dinámicas de los grupos irregulares con participación activa en la contienda electoral afecta más el panorama.

'Tanto la autoridad indígena que me avaló para ser candidato como mi persona nos tocó salir del territorio hace más de dos semanas. Él no ha regresado, le están haciendo acompañamiento una organización internacional y otras que están en el territorio y yo también estuve bajo prevención un tiempo, pero los votos no se consiguen encerrados, entonces tuve que salir', dijo Carlos José Díaz.

Asegura el joven que este debía ser un ejercicio de reparación política en territorios complejos no solo por la seguridad sino también por la conectividad.

San Rafael, la población de donde Carlos es nativo y residente, tiene más de mil habitantes.

La mujer en la política

El ser mujer y líder social como lo es Mayerlis Angarita parece ser un agravante a la hora de buscar los votos para la curul de paz en Montes de María.

Ella cuenta con un esquema de protección de la UNP y aún así siente miedo porque por su condición de líder social y con reconocimiento internacional es mucho más perseguida.

'Estamos siendo víctimas ahora de una persecución política en el territorio y las mujeres que estamos en este proceso afrontamos la violencia de género', anota Angarita.

Rechaza la actitud que ha tenido el Estado frente a ellos, los candidatos, de no otorgarles, hasta ahora, los anticipos para invertirlos en publicidad y pedagogía que es lo que esta campaña necesita.

{"titulo":"Las expectativas de los sucreños con la Ley de Seguridad Ciudadana","enlace":"https://www.elheraldo.co/sucre/ley-de-seguridad-ciudadana-estas-son-las-expectativas-de-los-sucrenos-886880"}

'Pese a esto seguimos luchando y resistiendo porque la voz de las verdaderas víctimas llegue al Congreso. El trabajo de Mayerlis Angarita con más de 800 mujeres y la suma de 96 procesos más de ellas en el territorio merece llegar al Congreso. No ha sido fácil, he sido víctima de estigmatización, difamación y otros y eso es porque nos ven fuertes, porque saben que el trabajo nuestro en pro de las mujeres víctimas de Montes de María es una realidad', anota Mayerlis Angarita.

Sobre la presencia de actores armados en el proceso esta líder advierte que las AGC o Clan del Golfo están amenazando a candidatos, pero 'yo estoy rodeada de mujeres berracas y valientes y vamos a seguir adelante en este proceso'.

Víctimas aliadas con los políticos

El abogado penalista Miguel Mariano Salas, un hijo del municipio de Colosó al que la violencia desplazó hacia Sincelejo, pero que por su labor y por el amor a esa tierra siempre ha estado presente y vigente en el territorio, también aspira a esa curul de paz por Montes de María.

Su campaña, aunque silenciosa, está vigente y para ir a buscar los votos a la zona rural saca el poco de tiempo que le permite la apretada agenda de audiencias que debe cumplir como defensor público que es.

La Asociación de Pequeños Apicultores de Colosó (Apicol) es quien avala su candidatura, de la que dice que no ha sido fácil porque son campañas pobres y el desplazamiento por la zona rural, donde están los electores, es costoso.

'Hacer un recorrido por estas zonas dispersas sin dinero, sin carro y sin protección es correr un gran riesgo. El Estado debía aportarnos unos recursos que aunque fueran mínimos los necesitamos para nuestras campañas, pero eso a la fecha no se ha dado'.

Salas al igual que los otros candidatos da fe que el orden público en la zona no es el mejor y él en carne propia tuvo que devolverse de una correría por Chalán porque había presencia de actores armados.

'Las cosas son complicadas tanto en Montes de María de Sucre como de Bolívar. El Estado nos tiene abandonados', anota el profesional del derecho que a su vez denuncia que las víctimas están haciendo alianzas con los políticos tradicionales para hacerse elegir 'y con ello están traicionando el sentir del proceso de paz. Eso quedó diseñado para que lo disputáramos nosotros, y esto es culpa del Estado por no darnos los recursos y porque algunas víctimas se prestan para eso'.

Miguel Mariano Salas, conocedor de las leyes, quiere llegar al Congreso para hacer cumplir la Ley de Víctimas que él ayudó a construir y uno de sus objetivos es que el Estado repare al 75% de las víctimas que no lo han logrado en el país.

Dice que para lograr esto necesitan actuar en bancada, es decir, los 16 electos que también deben propender porque las víctimas tengan becas para estudios profesionales.

Para estas elecciones parlamentarias los habitantes de Montes de María tienen la opción de pedir las dos tarjetas electorales, la de la circunscripción de paz y la departamental y ese es un proceso que no todos los ciudadanos conocen, por eso la pedagogía en los 138 corregimientos de los 15 municipios de Montes de María, 8 de ellos en Sucre, es una necesidad que apremia.