Compartir:

Era 1989 y Ozzy Osbourne, el legendario cantante de Black Sabbath, estaba completamente fuera de sí por las drogas. En un momento de locura, intentó estrangular a su esposa, Sharon. Ella, con reflejos rápidos y el corazón en la garganta, logró presionar un botón de pánico que activó la llegada de la policía.

Contra todo pronóstico, siguieron juntos y basaron su relación en una dosis de pasión, lealtad, adicciones y muchas segundas oportunidades.

Ozzy y Sharon se conocieron en 1970. Ella tenía solo 18 años y estaba aprendiendo del negocio musical de la mano de su padre, Don Arden, un conocido mánager. Él ya era famoso como cantante de Black Sabbath, aunque su vida personal era un desastre, ya que, estaba casado con otra mujer y tenía tres hijos que casi no veía.

Lea también: Ozzy Osbourne, el Príncipe de las Tinieblas que redefinió el ‘heavy metal’

En 1979, Ozzy fue expulsado de la banda por sus excesos con las drogas y el alcohol. Fue entonces cuando Sharon decidió apoyarlo. Se convirtió en su mánager, lo ayudó a levantar su carrera como solista y, en ese proceso, se enamoraron. Tres años después, se casaron en Hawái.

Hijos, televisión y fama

La pareja tuvo tres hijos: Aimée, Kelly y Jack. Aunque Aimée siempre evitó la fama, los otros dos se volvieron conocidos gracias al reality show The Osbournes, que mostraba la caótica vida familiar del cantante. El programa fue un éxito y rompió todos los esquemas de la televisión. Mostraba una familia disfuncional pero real, con amor a su manera.

A pesar de la fama y el éxito, las drogas seguían siendo un problema. En 1989, ocurrió lo impensable. Ozzy intentó matar a Sharon. Ella lo contó años después en un documental. Dijo que nunca había sentido tanto miedo. Afortunadamente, logró pedir ayuda justo a tiempo.

Después de ese episodio, Ozzy fue internado en un centro médico durante seis meses. Sharon pensó en divorciarse, pero al final decidió darle una última oportunidad, con una condición clara: si volvía a caer, ella se iría.

En 2003, Ozzy fue diagnosticado con Parkinson, una enfermedad que afecta el movimiento. Recién en 2020 lo hicieron público. Desde entonces, Sharon fue su mayor apoyo. “Nos ha enseñado a valorar cada día”, dijo ella en una entrevista.