El nuevo papa, cuyo nombre se conocerá en breve, ha pasado de la Capilla Sixtina a la llamada Sala de las Lágrimas, con objeto de vestirse para presentarse al mundo en el balcón de la basílica de la Plaza de San Pedro.
Lea ¡Habemus papam!: fumata blanca en el Vaticano
Así está previsto en el ritual de elección del nuevo pontífice, de la que se dio cuenta a las 18.08 horas (16.08 GMT) mediante la fumata blanca.
El nuevo papa ha logrado al menos dos tercios de los votos de los 133 cardenales electores (que son 89) y tras ese recuento, habrá aceptado el encargo y decidido con qué nombre quiere ser llamado.
Aquí Café de Sofía Vergara llega a Colombia
Desde la Capilla Sixtina el elegido es invitado a ir a la ´Sala de las Lágrimas’, donde desde hace días está preparada la vestimenta que puede empezar a usar.
La habitación es conocida con ese nombre porque históricamente es el lugar donde el elegido podía permanecer tranquilo un momento y, eventualmente, rezar y llorar para desahogar la tensión acumulada.
Además Una ‘fumata rosa’ pide durante el cónclave una mayor presencia de mujeres en la Iglesia
En esa cámara hay tres hábitos largos o sotanas de color blanco de distinto tamaño en función de la altura del elegido, así como cuatro vestimentas cortas tipo sobrepelliz, una muceta o esclavina de color morado y una estola púrpura con decoración dorada.
También, si lo desea, puede escoger entre zapatos de distintos números, fajines, un cordón y una cruz dorada, todo allí dispuesto.
Aquí “No hay límites para lograr los sueños”: mini José Feliciano
Luego recibirá el homenaje del resto de cardenales.
Corresponde al protodiacono, el cardenal francés Dominique Mamberti, asomarse primero al balcón de la basílica para anunciar quién es el elegido y el nombre con el que gobernará la Iglesia.
Lea ‘Águila’: el secreto mejor guardado de Alejandro Obregón sale a la luz
Después el nuevo papa dirigirá unas palabras a los presentes en San Pedro y hará la bendición urbi et orbi.